En el Estado de México se ubican dos de cinco tiendas de autoservicio con los precios más altos en lo que corresponde a productos de la canasta básica del país.
Así lo dio a conocer la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), quien informó que en dicho ranking también se encuentran establecimientos de la CDMX y Guanajuato.
En los primeros lugares con establecimientos del país con la canasta básica más costosa, se encuentran: Soriana Súper, en la CDMX, con un costo de mil 037.25; luego se ubica el Waltmart de Guanajuato, cuyo precio de los productos es de mil 036.80; y Soriana Híper en la CDMX, con un costo de mil 014.10 pesos.
Le siguen en esta lista: Mega Soriana de Caocalco, con un precio en los productos de mil 001.66 pesos y Waltmart de Tlalnepantla, con un costo de 999.40 pesos.
Los 21 productos de la canasta básica tomados en consideración para este estudio, son: Aceite de canola o maíz, arroz en grano, azúcar morena, bistec de res, cebolla, chile serrano, chuleta de puerco, frijol en grano, huevo de gallina blanco, jabón de tocador y jitomate saladet.
También destacan: el limón, la manzana, el melón, el pan de caja, la papa, el papel higiénico, la pasta para sopa, el pollo entero, la tortilla de maíz y la zanahoria.
Para la integración de la canasta básica, la Profeco tomó como referencia la Línea de Pobreza Extrema por Ingresos (Canasta Alimentaria) definida por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo social (Coneval), porque es el organismo encargado de establecer los lineamientos y criterios para la definición, identificación y medición de la pobreza en el país.
Ante dicho panorama, la Profeco anunció que reforzará el programa de “quién es quién” en los precios de la canasta básica, en donde se dará a conocer periódicamente cuáles son las empresas que están subiendo de manera excesiva el costo de los productos de primera necesidad.
Finalmente, la procuraduría dio a conocer que, a través de sus diferentes redes sociales y página de internet, orientará en este último tramo del año a los consumidores en sus compras para evitar que compren a precios excesivos productos de la canasta básica, como leche, huevo, tortillas, carne, abarrotes, frutas y verduras.