La tendencia entre muchas empresas mexiquenses es la subcontratación u outsourcing, cuyo objetivo es reducir costos y deslindarse de responsabilidades, a costa de la calidad laboral.
Lourdes Medina, investigadora de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), afirma que ante la crisis financiera de las corporaciones, este tipo de contratación registra un crecimiento exponencial en el país y las entidades industrializadas, como el Edomex.
“Muchos empresarios juegan con convenios de base y la subcontratación, es decir, cuentan con personal bajo ambos esquemas, lo que propicia un ambiente de estrés debido a la competitividad”.
“El outsourcing se presenta no sólo en las compañías privadas, sino en las públicas, incluidos museos, secretarías de Estado e instituciones médicas, y una de sus características es que adelgaza el aguinaldo, el seguro médico, el pago por antigüedad, la prima de vacaciones, el pago por retiro y cualquier otro servicio extra al sueldo base, pero a pesar de la inconformidad, la gente acepta estas condiciones ante falta de oportunidades laborales”.
“Las empresas en estos momentos tienen mayor personal bajo subcontratación, por ello los trabajadores temen por la estabilidad de su empleo, ven riesgo al no contar con antigüedad o seguro médico”.
“Evidentemente el nivel de aceptación de los trabajadores respecto de la subcontratación es menor a la de base y son pocas las personas que eligen por voluntad cambiarse de modelo. “Los empleados subcontratados anhelan el aguinaldo, el seguro médico y las vacaciones, por eso no están tan satisfechos con su esquema de contratación”, apuntó la investigadora.
A pesar de que el nivel de satisfacción y confianza con la subcontratación es menor, los empleadores optan cada vez más por este sistema, porque sus obligaciones con los trabajadores se reducen al no tener responsabilidad alguna hacia ellos.
Como ejemplo señaló que la Secretaría de Cultura federal maneja contratos bajo el esquema Capítulo 3000, por ello trabajadores han protestado por falta de pagos, inconsistencia en sus prestaciones y obstáculos para realizar sus labores. Lo cierto es que este padrón no cambiará; por el contrario, va en crecimiento en el país.