Los precios en los menús de los restaurantes se han incrementado entre 8 y 9 por ciento respecto a los vigentes en 2017, lo cual es "un aumento muy razonable"; ademas, en muchos casos se está compensando con promociones, afirma Pablo Durán Gallastegui, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), en el Estado de México.
Aseguró que empresarios del sector continúan absorbiendo las alzas en diversos productos alimenticios a través de una disminución en sus utilidades.
"Consideramos que fue un incremento muy razonable, considerando que en los precios no solamente influye la inflación sino que arrastramos factores macroeconómicos que nos afectaron el año pasado y aún nos afectan", indicó el dirigente empresarial.
Durán Gallastegui recordó que en semanas pasadas subió de manera importante el precio del huevo; si bien afecta a nuestros negocios, explicó, al transformar el alimento y venderlo en un platillo terminado el margen de utilidad no necesariamente va en proporción de los incrementos.
Es decir, si el kilo sube 30 por ciento, ejemplificó, los precios en las cartas no se elevan en la misma proporción.
Si bien los restaurantes sí son sensibles, alzas como la de este producto básico afectan más a las familias que tiene menos para comprar, en la parte de la canasta básica.
En la parte de los restaurantes, aseguró, son aumentos que "seguimos absorbiendo a través de una disminución de nuestras utilidades y no se ven reflejados en los precios finales en el mismo porcentaje".
Detalló que en las zonas comerciales donde hay grandes "manchas" de prestadores de servicios de alimentos; "hemos entrado en una competencia de promociones para captar la atención de los clientes y de esta manera evitar que baje el consumo o se reduzca la frecuencia de las visitas a nuestros establecimientos", expresó Durán Gallastegui.