Cuando el mundo se redujo a una pantalla, los ojos humanos voltearon en busca de ayuda.
Antes de la pandemia, la era digital ya había marcado pauta en la dinámica visual, pero con la contingencia sanitaria creció la dependencia hacia los dispositivos que emiten distintas radiaciones.
En ese contexto, negocios como las ópticas se han convertido en lugares de obligada visita ante el posible impacto en la vista de las personas.
Una de esas ópticas es “Optiliz”, donde llegan padres y madres de familia preguntando por lentes reforzados para atenuar dichas radiaciones, además de filtros en lentes para el ambiente exterior.
“Se incrementaron las ventas porque se incrementaron las graduaciones (visuales). En realidad, los chicos ahora con las clases que fueron virtuales tienen más tiempo en las computadoras”, reconoció Elizabeth Ávila Hidalgo, oftalmóloga de "Optiliz".
Los efectos en la salud visual por el uso de variados dispositivos en el periodo de confinamiento por la pandemia, los hace ser una opción para atenuar efectos colaterales.
Las primeras recomendaciones a los pacientes es mejorar la graduación de sus anteojos y utilizar lentes de 35 milímetros para cubrir los ojos sensibles a la luz
“Para evitar el desgaste de la vista por la exposición de pantallas, (recomendamos) un lente adecuado donde cubre toda la parte del ojo, es decir, la cuenca del ojo. Dos, tenemos diferentes tratamientos, tenemos el antirreflejante, que es nuestra primera gama, o la básica”.
Los antirreflejantes y blue ray son materiales utilizados en micas claras para evitar destellos o filtros de luz que desgasten el ojo humano. Mientras que en micas oscuras este tratamiento se llama polarizado, recomendado principalmente para quienes manejan en carretera.
“Segundo tratamiento es el blue ray, si hay fotosensibilidad se pone blue ray, más la mica fotocromática, y al destello de luz, a la hora de manejar”, explicó la oftalmóloga.
MEJOR VISIÓN
La emergencia sanitaria por Covid-19 no detuvo las actividades de las ópticas. Sólo redujeron el horario de atención.
En las cuatro sucursales de “Optiliz” adoptaron medidas de seguridad sanitaria. En los accesos hay tapetes sanitizantes y dispensadores de gel antibacterial.
“(Las medidas sanitarias) las seguimos llevando al pie de la letra", dijo Elizabeth sobre el procedimiento de atención.
En la atención de pacientes aplican de forma estricta el protocolo de prevención de Covid-19, como el uso del cubrebocas y caretas para la aplicación de exámenes.
“Nosotros tuvimos que usar cubrebocas y careta, porque al ajustar un eje nos acercábamos casi a 50 centímetros, que es donde logramos ver un eje, entonces sí había un acercamiento”.
La mayoría de los pacientes llegan buscando cambiar la mica o el armazón de sus lentes, por lo que la tarea de los especialistas inicia al ahondar en cuestión de salud, no sólo de estética. Luego aplican el examen de agudeza visual en un autorrefractómetro.
Enseguida, hay una segunda prueba, denominada examen tradicional de la vista, a través de la cual se muestra al paciente su grado de visibilidad y de requerirse, se van incorporando elementos de graduación.
Las pruebas concluyen con la prueba de “afinación visual de piel”, en la cual al paciente se le coloca cierto nivel de graduación en los ojos.
El equipo de “Optiliz" tiene conocimientos médicos en el área de la vista, lo que le da un plus de atención en temas de cansancio de ojos por uso de lentes.
REDES SOCIALES, UN NUEVO INICIO
Las redes sociales se han convertido en un escalafón para los negocios. Las ópticas no se han quedado atrás. A raíz de la pandemia, reinventaron la forma de atención.
"Optiliz”, con más de 12 años en el mercado, tuvo que que colocarse las gafas de las redes sociales. La empresa se ubica en el centro de la ciudad de Toluca.
Para ello contrató a un equipo de especialistas en manejo de redes sociales, quienes se han encargado de la nueva imagen de una óptica tradicional.
“Ellos nos han ayudado a darnos a conocer, a concretar los valores que somos en Optiliz, de cómo trabajamos y creo que eso ha sido algo nuevo para nosotros, porque nunca lo habíamos hecho tan profesional”, confesó Elizabeth.
Los profesionales en redes sociodigitales les apoyaron en la reactivación, al generar mayor interacción con los cibernautas con preguntas, publicaciones, citas, promociones y preguntas en general. También utilizaron a Instagram, dónde el contenido es meramente visual e implementaron atención personalizada.
Cambiaron sus colores, logo y tarjetas de presentación.
Inclusive, el cambio originado a partir de las redes sociales hizo que en sus cuatro sucursales se homologaran, lo que ha permitido a sus clientes que la puedan identificar más fácilmente.
“Hemos crecido, me gusta, es algo nuevo también para nosotros, aún es poco tiempo para ver grandes resultados, pero ya llevamos un mes reinventándonos con ellos”, aseguró la dueña de Optiliz.
SALUD HUMANA
La pasión por mejorar la vista de las personas surgió cuando Elizabeth concluyó sus estudios como enfermera. Se preparó año y medio en la Ciudad de México como oftalmóloga. Su formación de enfermería le sirvió para profesionalizarse en la salud ocular.
"Optiliz" le permitió dar el sustento a sus hijos, tener horarios accesibles en su agenda diaria y desarrollarse.
Hace 12 años, Optiliz empezó siendo una empresa familiar, la cual atendía Elizabeth con sus hermanos. Actualmente, son un grupo de 12 personas que se encuentran trabajando y capacitándose de manera constante en las cuatro sucursales ubicadas en el centro de la ciudad de Toluca.
Su reto es educar al paciente de que no sólo es un cliente que necesita anteojos, sino que debe preocuparse en mejorar la calidad de su vista y quedarse con una gran satisfacción profesional y personal.
“Que una persona te diga, en verdad: pensé que veía bien, o cosas así, por el estilo. Es algo que a mí me gusta, como profesional de la optometría y de la enfermería general”.
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