Es el caso de ARVE Seating, una tapicería familiar encargada de hacer cómodos los viajes de los transportistas de carga pesada.
Con 40 años de experiencia en el cambio y mejoramiento de las cabinas de tráilers y camiones repartidores, esta empresa familiar tuvo un giro inesperado durante la pandemia.
El dueño de esta tapicería, Alfonso Fuentes González, indicó que los primeros meses de confinamiento provocados por la Covid-19, los lograron superar gracias a sus principales clientes como las cerveceras y refresqueras.
Y es que las empresas de transporte de carga no pararon su actividad comercial, aminorando los daños económicos que dejó la pandemia en todos los giros comerciales.
“El comportamiento de otros clientes era diferente, seguían moviéndose quizás por que traían químicos o comida, perecederos”, explicó.
Este hecho causó un efecto contrario al que se estaba presentado en la mayoría de los giros comerciales no esenciales, pues la tapicería registró un incremento superior al 10% en sus ventas.
“Al final del año, el comportamiento fue hasta un 10% mejor que el año anterior, estamos hablando del 2020, nos fue bien, muy diferente al 2021, pues pensando que se iban a caer las ventas, vendimos hasta un 10% más”, enfatizó.
AJUSTE
Sin embargo, el 2021 no ha sido del todo fácil para ellos, debido a un cambio repentino en el mercado de vehículos de carga pesada, por lo cual la empresa familiar de tapicería trabaja actualmente al 70% de su capacidad.
Esta situación se complicó a principios de año, pues el Covid-19 perjudicó la salud del dueño de la tapicería y lo obligó a ausentarse un mes.
“Cuando yo regresé a trabajar, en febrero, el mercado ya era diferente, el mercado ya había cambiado y las ventas hoy en día están un 30% abajo en relación a lo que normalmente vendemos”, lamentó el experto tapicero.
Por ello, su incursión en las redes sociales se ha advertido como una salvación, ya que han encontrado un mercado nuevo en Facebook e Instagram, al igual que en su página web y plataformas de ventas en línea.
Así han logrado reactivar sus finanzas para la segunda mitad de 2021.
La experiencia digital se complementó cuando ingresaron a Mercado Libre, pues las ventas se hacían de manera instantánea generando un flujo de dinero más rápido.
“La ventaja es que esas ventas en redes sociales son de contado, eso ha ayudado mucho, pues aunque son pocas las ventas, llega el dinero fresco a diferencia de las empresas, que todo es a crédito”, describió Fuentes González.
El empresario reconoció que fue por su hijo, Alexis Alfonso, por quien decidió diversificar a la empresa a través de la web, y a pesar de que desde 2018 ya estaba la propuesta sobre la mesa, fue hasta la pandemia cuando se decidieron a utilizar esta alternativa.
Esta innovación emprendida en tiempos del Covid-19, también cambió la visión del negocio de la tapicería, pues ahora se tiene una mentalidad más fresca y abierta a los cambios que pueden generarse de la interacción digital.
Además consideran que aumentaron su capacidad para adaptarse a las nuevas condiciones y lograr mayor resiliencia en tiempos adversos, los cuales continúan enfrentando con estrategia y planeación.
Son artesanos del transporte
La familia Fuentes Hernández, propietaria de ARVE Seating, trabaja en el arreglo y mejoramiento de cabinas, toldos, asientos y todo lo referente con la tapicería de trailers y camiones de medio rango.
El trabajo implica creatividad y termina siendo artesanal.
“Independientemente de la tapicería reparamos algunas partes de los asientos, no nada más es reparar el asiento y el respaldo, tenemos cojines, mecanismo, hacemos adaptaciones con herrería.
“Es difícil por qué cada trabajo que se hace, a pesar de haberlo hecho mil veces, siempre es difícil porque es una artesanía, hecho a mano, pues no se puede automatizar”, explicó Alfonso Fuentes González, propietario de esta tapicería.
El reto es mayor cuando deben trabajar contra el tiempo y resolver problemas que se presentan en cada asiento, pues el negocio de los transportistas no puede esperar.
“Un camión no se puede parar, siempre preguntamos qué tiempo tenemos para entregarlo y nos dicen ‘mañana, pasado mañana, hoy mismo, o en una o dos horas”, indicó.
Legado familiar
En marzo de 1981, Alfonso Fuentes González llegó a Toluca para trabajar en una empresa que daba mantenimiento a los camiones de cerería de la capital mexiquense.
Como encargado de compras y refacciones, el joven de 20 años aprendió todo lo relacionado con el transporte.
“Desde ese momento yo empiezo a reparar asientos para tracto-camión, entre tantas cosas que lleva un camión. Para mí es un antecedente de mi trabajo”, señaló.
Luego de cinco años renunció y buscó en otros giros comerciales hasta que el destino lo colocó en una empresa de fabricación de asientos de autos.
Sin embargo, fue despedido a los dos meses por un recorte de personal.
Desde ese momento, y con 25 años de edad, decidió emprender su camino en el área de transportes.
Así optó por comprar la maquinaría necesaria y abrir la tapicería que hoy lleva por nombre ARVE Seating.
Durante 40 años se ha dedicado a la reparación de asientos de tracto-camión, trailers y camiones de rango medio, conservando a sus clientes más fieles en Veracruz, entidad donde le han dado trabajo los últimos 35 años.
"Lo más duro no es conseguir un cliente nuevo, y eso es muy difícil y más en la actualidad, sino mantener a los clientes que ya se tienen”, afirmó el dueño de esta tapicería, que sigue abriendo para darle comodidad a quienes a diario recorren cientos de kilómetros a bordo de una unidad pesada.
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