Los sectores laboral y empresarial piden a las autoridades estatales que se vacune a la totalidad de los trabajadores contra la influenza, ya que tienen conocimiento de que están disponibles más de 3 millones de dosis, aunque se les brindará prioridad a las personas vulnerables.
En una conferencia de prensa web, líderes obreros y la presidenta del Consejo Coordinador Empresarial del Estado de México (CCEM), Laura González Hernández, advirtieron sobre el rebrote que podría registrarse en este último tramo del año de influenza asociado al Covid-19 (sindemia), por lo que consideraron indispensable que se tomen las previsiones desde ahora para evitar contagios entre los trabajadores.
“Coincidimos con el CCE nacional, en el sentido de que, para una pandemia o epidemia, la única solución definitiva será la vacuna que en todo el mundo estamos esperando”, expresó.
Hicieron un llamado para que las vacunas contra la influenza lleguen cuanto antes a los trabajadores, porque se trata de un sector muy expuesto lo mismo en su trayecto diario a las empresas, que al interior de éstas y en sus hogares.
“Hacemos un exhorto al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y al sector Salud para que realicen una campaña especial sobre vacunación en todos los Centros de Trabajo”, subrayó.
En su intervención, Jorge Díaz Galindo Hurtado, oficial mayor de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) reconoció que les preocupa la situación de todos aquellos empleados que permanecen en condiciones de vulnerabilidad por el Covid-19, ya que el gobierno federal estableció 15 tipos de enfermedades (lactancia, cáncer, obesidad, diabetes, hipertensión y el asma, entre otras), con las que se corre mayor riesgo.
“Es el empleador quien debe pagar los salarios a los trabajadores, pero se encuentra atravesando por una situación que lo coloca en problemas financieros, y que obliga a pedirles a sus trabajadores que le ayuden o los liquida”, aseveró.
Asimismo, propuso al IMSS que todos los pacientes con la situación de alta vulnerabilidad pasen a ser parte de una incapacidad por enfermedad general, mediante la que obtengan –por lo menos- el 60% de sus salarios.
“Así estaríamos evitando que los trabajadores pudieran ser liquidados, porque un juicio laboral largo evitaría que pudieran recibir diariamente sus sueldos”, indicó.
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No bajar la guardia
Mientras que Óscar Moreno Moreno, presidente del Congreso laboral, destacó la necesidad de “no bajar la guardia” en lo que corresponde a las medidas de prevención en contra del coronavirus, como el hecho de mantener la sana distancia, la higiene en el transporte público y en los hogares, entre otras.
Reconoció que existen empresas que ya no pueden seguir pagando a los trabajadores ante la falta de crecimiento económico que se registra por Covid-19, lo cual está propiciando despidos.
Por su parte, José Luis Canchola, líder del Congreso del Trabajo resaltó la importancia de la prevención del coronavirus, porque los trabajadores ya no están en condiciones de seguir enfrentando “paros técnicos” y ver reducidos sus salarios.
También pidió tener especial cuidado con la fusión de enfermedades (Covid-19 e influenza), porque no se sabe qué tanto podría repercutir esta situación en el sector que representa, así como entre la población en general.