A unos días de que se lleve a cabo el fin de semana más barato del año “El Buen Fin”, personas consultadas por El Sol de Toluca, tienen la esperanza de que realmente se apliquen descuentos -del 17 al 20 de noviembre- que les permitan hacerse de algún patrimonio.
Tal es el caso de Christian Cortés, quien espera el arranque del programa antes referido para poder adquirir una estufa en promedio de 5 mil pesos, ya que su costo está “por las nubes” y no ha terminado de pagar un refrigerador a crédito por un monto de poco más de 10 mil pesos “en cómodos pagos semanales”.
“La verdad no creo mucho en El Buen Fin porque pienso que los descuentos que tanto anuncian no son reales, pero esperaremos a ver si es conveniente hacerme de una estufa porque no la he podido adquirir, ya que el costo se me hace alto para pagarlo al contado -5 mil pesos-. Además, estoy pagando un refrigerador a crédito, con lo cual aumentó al doble su precio”, explicó.
Cabe mencionar que entre los productos que más consume la población durante El Buen Fin, se encuentran: Electrónicos, electrodomésticos, muebles y decoración del hogar, moda, deportes, alimentos para mascotas, discos, libros y revistas, así como bebidas, entre otros.
Mientras que información de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), indicó que el 45% de las personas dice no confiar en las propuestas de descuento de las empresas participantes; el 25% dice que no comprará durante la campaña 2023 debido a la situación económica actual y la inflación, y el 24% prefiere esperar a otro tipo de promociones y ofertas.
Por su parte, Brenda Reyes señaló que aprovechará el próximo fin de semana para comprar ropa y zapatos para sus dos hijos, debido a que considera que estos productos pueden ser más económicos durante El Buen Fin, ya que hace uso de su tarjeta de crédito.
Derivado de ello, la señora Brenda forma parte del 63% de los consumidores que adquiere productos con tarjeta de crédito durante El Buen Fin, según datos de 180 de las 256 Cámaras de Comercio del país, en contraste con el 36% de las personas que compra con efectivo.
“La realidad es que todos los productos básicos aumentan constantemente, incluso aquellos artículos que no lo son, como la ropa y el calzado, pero que también requieren nuestros hijos”, concluyó.