Biosintéticos, nuevos empaquetados, cosméticos libres de agua, cultivo de ingredientes en laboratorio, son parte de las nuevas tendencias para volver más sostenible la industria de la belleza con el objetivo de tener un negocio más amigable en el tema de salud y medio ambiente.
La belleza sostenible es un concepto que está adquiriendo cada vez más fuerza en la industria del maquillaje y la cosmética, donde se obtienen productos de alta gama pero gracias a alternativas sostenibles.
Entre ellos el uso de biosintéticos y su uso práctico en la industria de la belleza, las biotecnologías están impactando cada vez más en la producción de ingredientes para artículos de belleza porque los consumidores han confirmado que los ingredientes sintéticos son perjudiciales y algunos ofrecen una alternativa viable y más sostenible.
Es por eso que el uso de ingredientes extraídos orgánicamente o cultivados introduce una potencial volatilidad en la cadena de suministro, de acuerdo al artículo publicado el pasado 27 de mayo en el portal de Notipress con el título: Tendencias que podrían volver más sostenible la industria de la belleza en 2021.
El proceso de cultivo de ingredientes en un laboratorio reduce el impacto en la agricultura, pesca, extracción o participación de intermediarios quienes elevan los precios.
Por otro lado los nuevos empaquetados también serán indispensables para generar una tendencia sostenible para la industria de la belleza en 2021, en el documento se detalla que expertos señalan que los productos de belleza y el cuidado personal generan cerca de 120 mil millones de unidades de empaque cada año, de los cuales el 9% son botellas, envoltorios y otros desechos plásticos a base de combustibles fósiles y la mayor parte no son reciclados.
Cosméticos libres de agua también es una iniciativa, si bien, algunos productos, entre ellos el shampoo están compuestos por 90% de agua, ello aumenta los costos y las emisiones, así que eliminar el agua es un tema emergente clave en los escuerzos de las compañías.
La transparencia sobre el contenido de ingredientes empleados en productos es otra alternativa, esto porque los clientes exigen cada vez más información sobre de qué están hechos sus productos.