El servicio de agua potable quedará suspendido por una semana en la central de abastos de Toluca, de tal suerte que los condominos han recurrido a tomar medidas inusuales como recolectar agua pluvial para enfrentar el desabasto.

Tras el anuncio del Consejo de Administración a través de una circular el pasado lunes, varios condominos y comerciantes expresaron su molestia, pues el aviso les tomó por sorpresa.

“No tenemos agua, aquí nosotros vendemos comida y es complicado lavar trastes. Lo más grave es que nos avisaron el mismo lunes que no habría agua, ya no pudimos hacer nada”, refirió doña Francisca, dueña de un negocio.

La situación afecta de forma considerable las actividades comerciales, incluso, varios negocios optan por cerrar tal es el caso de los vendedores de papa, quienes necesitan el liquido para lavar sus productos.

“Nosotros nos hemos juntado para poder comprar pipas y llenar algunos recipientes que nos ayuden a lavar las papas, pero no vamos a poder seguir comprando agua”, dijo uno vendedor.

Cabe señalar que en el documento, la administración hace un llamado a los condominos a que acudan a las oficinas administrativas a cubrir las cuotas de mantenimiento y agua para poder solventar los gastos que representa la rehabilitación del pozo.

“Ahora nos quieren condicionar para pagar las cuotas de mantenimiento, pero la mayoría de los condominos no lo hace porque el recurso no se invierte. Vean la central y esta hecha un cochinero”, finalizó un condomino.