Elegir una nueva televisión o monitor es una tarea complicada, la enorme cantidad de modelos de las marcas y sus diferentes tecnologías dificulta tener una decisión rápida, por eso es importante la información previa sobre sus características para saber cual es la mejor.
Además de fijarnos en detalles como el tipo de panel que monta, el sistema operativo, si tiene barra de sonido incorporada, conectividad, el tamaño, HD, 4K u 8K, también es fundamental saber si su tecnología es LED, LCD, OLED, QLED o Plasma.
La pantallas de plasma contienen los compuestos químicos Xenón y Neón que se ubican dentro de las placas de vidrio, estos gases hacen que la pantalla se ilumine, las imágenes son brillantes y nítidas incluso en pantallas grandes, además brinda conexiones de alto contraste, colores cargados y un ángulo de visión amplio.
Mientras que aquellas que incorporan la tecnología LCD tienen una capa delgada de solución de cristal líquido intercalada entre paneles de vidrio transparente que con la ayuda de millones de transistores suministran las pequeñas cargas eléctricas que controlan los cristales, permitiendo que abran o cierren.
Cuantos más LED tenga el panel más zonas lograrán una iluminación óptima y tanto el contraste como los colores serán mejores, consumen menos energía y su imagen es mejor que las pantallas de plasma.
Las pantallas con diodo orgánico emisor de luz (OLED), los materiales de construcción son la novedad de esta tecnología, formada de una sustancia orgánica que brilla cuando se activa mediante una corriente eléctrica.
El material a base de carbono con iluminación propia forma la capa de pixeles de la pantalla, los subpixel cuentan con su propia fuente de luz controlada independientemente y no requiere de luz de fondo, los subpixeles pueden apagarse para producir un negro más profundo.
Por lo que toca a las pantallas LED utilizan diodos emisores de luz (LED) para crear las imágenes en la pantalla y ofrece megarelaciones de contraste del blanco más brillante al negro más oscuro. Su calidad de imagen es superior a tecnologías anteriores y ofrece muchas ventajas, por lo que actualmente es la más popular.
En tanto las pantallas que cuentan con tecnología QLED se iluminan con LED a lo largo de su borde, su función es igual que un LCD con retroalimentación LED de borde. Su característica fundamental es la utilización de un filtro de color de punto cuántico que es capaz de obtener un brillo significativo que el OLED.