No aparece en la letra. Tampoco en el video. Pero el fantasma de Andy Fletcher se siente en la nueva canción de Depeche Mode. Los de Essex siguen fieles a sí mismos, sustrayendo luz de las profundidades más oscuras.
El título del tema es, de por sí, sugerente: Ghosts Again (fantasmas otra vez). Y es que Dave Gahan y Martin Gore seguirán la gira sin uno de los suyos. No sin antes recordar que la vida se va en un suspiro. Igual que cuando el 26 de mayo de 2022 se enteraron que jamás volverían a tocar con Andy, fallecido a causa de un accidente cerebrovascular.
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Ahora, el trío devenido en dueto ha decidido nombrar a su gira de la misma forma que los antiguos romanos le recordaban a los poderosos la única certeza humana: Memento mori (recuerda que morirás).
Hay una nostalgia ochentera innegable en el nuevo sencillo de Depeche Mode. Los teclados recuerdan a los lejanos orígenes, cuando el synthpop comenzaba a dictar el ritmo de generaciones ávidas de pistas de baile y apenas un poco más. De fondo, sin embargo, yace la melancolía del compositor y letrista principal del grupo: Martin Gore. La voz barítona de Gahan —y los coros de Martin— son el vehículo para sostener una canción que, de algún modo, parece una despedida. ¿Será esta la última gira de Depeche Mode?
Detrás de la armonía de los teclados y el beat inconfundible de una banda que lo que le sobra es identidad, el dueto arroja reflexiones sobre la pérdida: “Un lugar para esconder las lágrimas que lloraste. Todo el mundo dice adiós”; “Sentimientos desperdiciados. Significados rotos. El tiempo es fugaz: veamos lo que trae”.
El video —ya disponible en YouTube— contiene simbolismos sobre la muerte en diferentes niveles. Por ejemplo, la partida de ajedrez entre Dave y Martin, vestidos de negro, con un velo cubriendo sus cabezas y con un báculo cada uno de ellos. Una escena que recuerda al juego entre Mefistófeles y Fausto, representado por el alemán Moritz Retzsch en su pintura Die Schachspieler. Según Christie’s, ese cuadro simboliza la batalla del Diablo o la Muerte contra el destino de un hombre.
Las escenas posteriores ocurren en un panteón, donde Martin simplemente se sienta recargado en una lápida sosteniendo una guitarra. Dave, por su parte, se arrastra entre la tierra. Al fondo, unas alas blancas, las mismas que tantas veces ha vestido Martin en varias de las giras de la banda, sólo que ahora abrazan una corona de flores blancas, como en un funeral.
La muerte no es un tema novedoso en la lírica de Depeche Mode. Sin embargo, la mayor parte de las canciones estaban centradas en hablar sobre ella como una pulsión que habita en todos los seres humanos y que adquiere muchas formas: ansiedad, miedo, depresión, adicciones, infidelidades. La muerte en un sentido casi freudiano. Dave Gahan estuvo a punto de morir en los años noventa, cuando su adicción a la heroína y a la cocaína era incontrolable.
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Al final, Depeche Mode fue un sobreviviente de casi todo, incluso del paso del tiempo, tan inclemente con los artistas que sólo quieren hacer éxitos. Ghosts Again prueba la certeza de esa regla. Y de paso ofrece una sesión tanatológica gratuita para quienes sufren la ausencia de alguien, de algo, de sí mismos.
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