Durante el sexenio pasado se cometieron más de 473 crímenes contra las personas de la comunidad LGBTTI, por expresión de género, cometidos en su mayoría con violencia extrema, pues las víctimas fueron mutiladas o sufrieron violencia sexual, aunque por cada registro, podría haber dos o tres más que no se conocen.
Ricardo Coyotzin de la organización Fuera del Clóset refirió que el Estado de México ocupa el cuarto lugar en crímenes de odio, aunque no hay un conteo oficial, pero esas cifras son de la organización LetraeSe.
Explicó que al no estar tipificado ese delito en todas las entidades es difícil llevar un conteo, pues hasta el momento sólo en 12 estados del país se han tipificado los crímenes de odio y en 18 ya se han establecido los matrimonios igualitarios, tal como lo mandató la Suprema Corte en su sentencia 43/2015.
La diputada Liliana Gollas Trejo de Morena refirió que la mayoría de las mujeres transexuales son corridas de su casa y su promedio de vida es de 35 a 40 años, pues por la falta de apoyo no reciben educación, no tienen empleo, se dedican a realizar trabajo sexual, o estilismo con muchos riesgos y refirió que el año pasado dos compañeras fueron asesinadas en Toluca: Chanel y Monse.
En su ponencia, Coyotzin advirtió que los integrantes de la comunidad LGBTTI sufren detenciones arbitrarias, en parques y plazas por elementos de seguridad pública por cuestiones como tomarse de las manos, o estar recargados y resaltó que en Toluca, Coacalco y Tlalnepantla lograron que se derogara la figura de las faltas a la moral.
La población LGBTTI, sostuvo, sigue siendo una de las más vulnerables de casos de SIDA y sufren discriminación; por lo cual hay una deuda pendiente e histórica.
La diputada Liliana Gollas refirió que en el estado de México ya se tipificaron los crímenes de odio con penas de 40 a 60 años de prisión. Hace unos días esas reformas al Código Penal fueron publicadas y entraron en vigor y anunció que propondrá la Ley de Identidad de Género y se ha planteado crear una comisión especial para la atención de esa comunidad.
Los jóvenes María Fernanda Salazar Sánchez y Cristopher Martínez Plácido fueron los organizadores del evento.