Toluca, México.-El temazcal es una de las alternativas terapéuticas que cura aspectos físicos y espirituales, y cuyo origen es ancestral que con el paso de los años se resiste a morir, por el contrario tiene un resurgimiento y está más vigente que nunca, sostuvo el médico tradicional en esa rama, Anastasio Martín Díaz Escamilla.
En entrevista en la Facultad de Antropología Social de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), dijo que esa tradición ha sido rescatada y conservada por los grupos originarios.
Mencionó que el temazcal, por ser una ceremonia ancestral, es una tradición en los pueblos originarios, por eso mismo “es una tradición que nos recata ya que contamos con mucha gente preparada a través de los años”.
Explicó que esta terapia es curativa porque el vapor sirve para transpirar y permite la apertura de los poros de la piel, que es el sitio por donde expulsamos las toxinas dañinas para el cuerpo, principalmente cuando existe consumo de drogas como el alcohol, tabaco y otras de tipo ilegal.
Asimismo las generadas por la ingesta de cárnicos e incluso de verduras que, aunque no lo pareciera, contienen toxinas que perjudican.
El ritual integra un momento de oración por parte de la comunidad presente, esto al invocar los cuatro puntos cardinales, norte, sur, oriente y poniente, así como los cuatro elementos: tierra, aire, agua y fuego.
Apuntó que el temazcal lo pueden utilizar pacientes de diversas enfermedades, desde simples gripes o catarros hasta cáncer, pues en su experiencia de 20 años dedicados a esa labor ha tratado a personas con varios diagnósticos.
Quien es llamado “linaje de caracol”, cuyo nombre es traducido del nahualt, lengua y cultura que practicaba dicha ceremonia, la cual se expandió a otras zonas de Mesoamérica, reiteró es una tradición sólida, fuerte y no es un negocio.
Por lo tanto, afirmó: “es una tradición que no se vende, no tiene precio, es lo que considere el usuario, ustedes ponen el precio”.
- No esta en peligro extinción
Al cuestionarlo sobre si esta ceremonia curativa está a punto de extinguirse tal como ha sucedido con artesanías, costumbres, tradiciones y lenguas originales ante lo abrumante de era digital y tecnológica, sin titubear atajó que no.
“Se han perdido lenguas en la Gran Tenochtitlán eran muchas y ahora son cerca de 65, se han perdido. Resurge como gran guerrero, como un pueblo solar”
Reconoció que la Ciudad de México, en específico en Cuajimalpa en la colonia Las Cruces, ha decaído esa actividad y el número de curanderos o médicos tradicionales, pero persiste en las zonas serranas del país.
Sin embargo, con el apoyo de las autoridades y de las instituciones educativas o gubernamentales ha logrado resurgir al expandirse por la República Mexicana, en donde se han abierto puertas para que la gente acuda o acceda a este tipo de tradiciones.
Asentó que esta terapia no va a morir porque un organismo por parte del gobierno da el apoyo y el reconocimiento a médicos tradicionales que se dedican a la medicina tradicional, además algunos medios de comunicación difunden el valioso tesoro que nos dejaron nuestros ancestros, que no está tasado en metales preciosos sino en riqueza espiritual.
“Estamos agradecidos porque la gente conserva la tradición, esto abre un abanico de oportunidades, estamos en universidades y esperamos no se termine la riqueza que tenemos”.