Toluca, México.- Comuneros de San Jerónimo Acazulco, que se mantienen en plantón en la zona de obras del Tren Interurbano México-Toluca, acusan hostigamientos y amenazas por parte de la constructora que lleva la obra, para retirarlos con el uso de granaderos.
Clemente Linares, uno de los representantes de los comuneros, denunció que desde este jueves les han notificado mediante los obreros que en los siguientes días habrán de llegar elementos policiacos para retirarlos y reaperturar las obras en esa zona.
"Descubrimos que la ferroviaria está solicitando la intervención de la fuerza pública para seguir ejecutando obras en el tramo de nuestra comunidad", acusó el comunero en conferencia para medios.
El pasado 19 de enero, el Juzgado Primero de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales del Estado de México otorgó la suspensión de la obra del tren en la zona de Acazulco, que abarca desde cuatro kilómetros, el cual quedó asentado bajo el número 109/2018.
Por lo que desde el miércoles pasado, los habitantes instalaron dos campamentos en el paraje El Portezuelo para evitar que las obras se reanuden.
Los habitantes alegan que la zona por donde pretenden pasar los rieles del tren es reserva ecológica y quedaría dañada.
“Ahí están nuestros manantiales y nuestra reserva forestal, son tierras protegidas”, explicó el comunero.
Los afectados externaron que hacen responsable al gobierno federal de cualquier acto violento que suceda en territorio y comuneros de San Jerónimo Acazulco.
También dijeron que temen por la vida de su comisariado de Bienes Comunales, Marcelino Narvaez de la O, así como de su apoderado legal, Santiago Pérez Alvarado.