Que los centros penitenciarios del Edomex hayan sido creados para la población varonil genera una condición doblemente vulnerable para las 2 mil 400 mujeres recluidas ya que registran carencia de atención médica especializada en cuestiones ginecológicas, necesidades básicas como una menstruación digna y el que cuenten con espacios dignos para su estancia.
Así lo advirtió Carlos Valdez Andrade, visitador general Especializado en materia de Personas Privadas de la Libertad de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), quién además resaltó sobre el abandono que padecen las mujeres privadas de la libertad.
"Se ha documentado que las mujeres que son privadas de la libertad, en el primer año reciben apoyo familiar y después del primer año que están recluidas, completamente se olvidan de ellas tanto las parejas como la misma familia y entran en una zona de abandono donde se les complica cubrir sus necesidades básicas".
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En ese sentido, el visitador general refirió que la Comisión realiza vistas constantes a las mujeres recluidas derivado de las peticiones específicas por su condición de mujer y donde el organismo se enfocan en verificar que la autoridad penitenciaria garantice sus derechos humanos.
En esas visitas de inspección, agregó, supervisan que la población femenina cuenten con espacios dignos e infraestructura necesaria para albergar a las mujeres.
Comentó además que en los siete centros penitenciarios, seis mixtos y uno exclusivo para mujeres, al menos 12 mujeres se encuentran embarazadas y 22 menores viven con sus madres.
Los centros mixtos del Estado de México son el Penal de Chalco, Ecatepec, Neza Bordo, Santiaguito, Texcoco, Tlalnepantla, ademas del Centro de Internamiento Quinta del Bosque, mientras que el de Neza Sur es de carácter femenil.
Medidas
El visitador Especializado en materia de Personas Privadas de la Libertad refirió que la Codhem, en coordinación con organizaciones de la sociedad civil legalmente constituidas ha llevado a cabo campañas para promover acciones como la menstruación digna de las mujeres privadas de su libertad pues por lo general esas necesidades básicas no se cubren por cuestiones del abandono familiar.
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E insistió en que el sistema penitenciario, al estar diseñado para albergar a hombres, genera complejidad porque los espacios que se adecuan para las mujeres tienen que cumplir con características como: contar con luz natural, artificial, agua, sitios suficientes para descansar y para deambular, entre otros aspectos.
Visitas
El visitador general recordó que dentro de las atribuciones de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México está el realizar visitas de supervisión a todos los centros penitenciarios y de reinserción social con la finalidad de velar por el respeto a los derechos humanos de las personas que se encuentran recluidas en esos lugares de internamiento.
En las visitas, agregó, verifican que la autoridad penitenciaria este implementando los mecanismo necesarios para garantizar los derechos de las personas, efectúa entrevistas con las personas privadas de la libertad para conocer la situación que se vive al interior de las cárceles y sobre sus necesidades básicas para implementan acciones legales y solicitar a la autoridad que garantice esos derechos.
Mencionó que también brindan asesoría jurídica y sobre los recursos legales a los que las personas privadas de su libertad tienen acceso para poder inconformarse por alguna determinación judicial que no sea considerada viable. Añadió que realizan de tres a cuatro visitas a la semana.
Asimismo, comentó que efectúan visitas para conocer las acciones implementadas para garantizar el derecho a la estancia digna y segura en prisión con recorridos al interior de las carceles, en módulos y celdas e identifican casos de presuntas violaciones a derechos humanos para constatar si se cuentan con infraestructura mínima para una estancia digna en prisión.