Especialistas en agua y medio ambiente hicieron un llamado a las autoridades de la Conagua y la Caem para no permitir el abastecimiento del líquido para el consumo humano. Esto debido a que la presa no cumple con la norma establecida por las descargas de aguas residuales sin tratamiento que recibe.
Al respecto, integrantes de la agrupación “La Ciudadanía es Primero” urgieron la atención de las autoridades de los tres niveles de gobierno ya que hasta el momento no han resuelto la contaminación que afecta a este cuerpo de agua.
Desde el 2006 la presa Madín es considerada como un embalse contaminado y diversos estudios han demostrado que el agua contiene metales como el aluminio y el hierro en concentraciones que rebasan los límites establecidos para la protección de la vida acuática y humana.
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Los especialistas coincidieron en que actualmente no se cumple la Norma Oficial Mexicana NOM SSS-27, referente al uso y calidad del agua, lo cual pone en riesgo la salud y dotación de los usuarios en todo el país, llamaron a los políticos a tomar en cuenta la opinión de los expertos.
El presidente de la Asociación Mexicana de Hidráulica, Marco Alfredo Murillo, estimó que la actual crisis de agua que sufre el Valle de México es “inducida y no real” debido a que el estrés hídrico obedece más a criterios políticos ya que no hay manera de que se acabe el agua en el planeta “solo está mal distribuida”.
En Atizapán, 9.3 millones de litros de agua al día de la Presa Madin son para el consumo humano de 46 mil 512 habitantes de las colonias, Lomas de Guadalupe, Calacoaya y Las Arboledas”, detallaron los especialistas; sin embargo, alertaron que la nueva planta potabilizadora inaugurada por el presidente Andrés Manuel López Obrador no debería de operar pues el agua no es apta para los humanos.
“El agua que se potabiliza en Madin contiene diferentes elementos tóxicos que la vuelven peligrosa para su uso en los hogares donde se distribuye”, expresó el ingeniero ambiental y perito, Julio Valdivieso.
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“Todos sabemos, menos las autoridades, que los lixiviados que escurren del tiradero de basura de Santiago Tepatlaxco, a través del río Tlalnepantla, llegan a la Presa Madín sin ningún control y sin ninguna sanción para quien contamina”, afirmaron los especialistas.
Tomar agua de la Presa Madín para su uso humano es un crimen ya que hoy es un pantano maloliente y sucio.
Según estudios efectuados por el Instituto Politécnico Nacional, las aguas de la Presa Madín contienen materiales tóxicos que generan mutaciones entre su fauna y peces, derivado del denominado “stress oxidativo” por falta de oxígeno y contaminación latente.
Los expertos coincidieron que a pesar de que el tema del agua es de soberanía nacional, “las políticas de distribución son incorrectas”.
Consideraron que las reformas aplicadas a la Comisión Nacional del Agua, “hacen que esta dependencia no tenga facultades para administrar y vigilar los recursos referentes al uso y aprovechamiento del agua”.