La aspirante a la rectoría de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Aurora López Ovando, se anticipa a la crónica de este proceso universitario.
Narra que el 23 de febrero fue citada por el rector Alfredo Barrera Baca. Ahí el funcionario universitario le informó que ella no podía registrarse para aspirar a la rectoría de esta universidad.
El argumento: la convocatoria para la elección de rector o rectora establece que quien aspire debe tener tres años previos en labores de investigación o impartiendo clases. El último cargo de López Ovando fue la dirección ejecutiva de la Fundación de la UAEM, a la cual ya renunció para aspirar a la rectoría.
“Me comentó (el rector) que no podía registrarme porque no cumplía los requisitos en su totalidad, aunque yo le reiteré que sí los tengo completos con base en la Ley. Él dijo que no porque los requisitos de investigación y docencia no los tenía”. revela López Ovando.
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La también doctora en Ciencias Políticas y Sociales le dijo a Barrera Baca que lamentaba no acatar sus indicaciones.
López Ovando señala que ya se había entrevistado anteriormente con el rector, pues tras salir la convocatoria de la elección de rectoría, le externó su aspiración.
“Sí le extrañó muchísimo”, admite, al recordar la reacción del rector.
Aclara que los citados requisitos no están contemplados en la legislación universitaria, ni se habían incluido en las tres últimas elecciones de la rectoría.
“Es una situación que agregaron ellos (la comisión electoral de la universidad), pienso que muy a propósito para evitar que más personas se pudieran registrar como se había anunciado inicialmente, que iba a ser una apertura democrática”, expresa.
La aspirante advierte que este 25 de febrero acudirá a registrarse como candidata. En caso de negarle el registro plantea acudir a organismos en materia de derechos humanos y no descarta interponer un amparo legal.
“Sí existe la posibilidad de un amparo”, anticipa.
No es la primera vez que aspira y acusa bloqueos. Recuerda que en el proceso donde fue electo como rector, Jorge Olvera García, intentó registrarse. Sólo llegó a la puerta.
“Integre todo mi expediente y el mero día del registro me abordaron a la entrada de la universidad, en el aula magna, y me dijeron que no podía subir, me obstaculizaron la entrada”, recuerda, “la verdad sí me asuste, me intimidaron, me regrese”. No conocía a las personas que la interceptaron.
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AUTONOMÍA VULNERABLE
López Ovando refiere que la autonomía de la UAEM ha sido impactada por asuntos como la investigación de La Estafa Maestra, revelación que la aspirante a rectora considera como un episodio muy doloroso para esta institución.
“Sí tenemos autonomía, pero está en entredicho esa autonomía en este momento”, apunta, “solamente el ejemplo que le doy, de lo que he leído en relación a La Estafa Maestra hay ahí una situación muy nublada”.
En dicha investigación la universidad estatal fue relacionada con la instrumentación de contratos irregulares con distintos proveedores.
“En este momento todo es especulación ¿no?, pero el dinero está ahí flotando”, acota.
En caso de ser rectora aclara que no existirían obstáculos para investigar dicho caso.
“Es un prieto así bien grande en el arroz que tenemos y yo voy a colaborar con las autoridades para que esto se esclarezca, no voy a obstaculizar para nada la investigación, pero tampoco acusar a nadie porque no tengo ninguna prueba para hacerlo”, anticipa.
La aspirante a rectora descarta representar a los grupos tradicionales de poder al interior de la UAEM. Incluso considera que es un momento adecuado para romper con dicha inercia.
“Cuando menos yo no he tenido que acudir al gobierno del estado para pedir ninguna autorización”, indica, al cuestionarle sobre la posible injerencia de actores externos en la universidad estatal.
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Aclara que su intención de postularse obedece a la petición de universitarios, a la cual suma su experiencia profesional, además de considerar que es tiempo de la mujer.
“Mi tesis de doctorado en eso versó, en la poca posibilidad que las mujeres tienen para incursionar en la política”, señala, “estamos en planos secundarios siempre, en la mayoría de los casos, necesitamos darles a saber que tenemos tanta capacidad como los hombres”.
La doctora en Ciencias Políticas y Sociales puntualiza que su perspectiva es considerar la participación de hombres y mujeres, con el fin de fortalecer a la UAEM.
Su propuesta la delinea con la atención inmediata para los sectores de la universidad, un manejo adecuado de las tecnologías e incentivar la participación democrática de los universitarios.
“Que tengamos representantes auténticos, que no estén oficialmente al servicio de una sola persona y que lleven realmente la voz de sus comunidades, porque están hartos de que no se les escuche, que no se les atienda”, reconoce.
Ante la posibilidad de no obtener su registro oficial, la aspirante rechaza declinar en favor de otro candidato o candidata.
“Si no se me permite, me retiro después de luchar hasta donde se pueda legalmente”, advierte.