Lerma, Méx.- Mientras miles de habitantes de tres comunidades que conforman el núcleo comunal de Huitzizilapan esperan que finalice la construcción de un pozo de agua que les dotará del vital liquido, autoridades de bienes comunales promovieron un amparo para parar la obra por una supuesta invasión de tierras, por lo que auguran una posible revuelta social en la zona.
Al respecto, Roberto Andrés Pérez, presidente del Comité de Agua de Las Rajas Huitzizilapan, así como el delegado Román Viano, explicaron que debido a que poco más de seis mil habitantes de Las Rajas, La Unidad y Las Mesas Huitzizilapan, se dotaban de agua solo de escurrideros, gestionaron la perforación de un pozo con las autoridades respectivas.
Derivado de varios años de trámites, indicaron que finalmente las autoridades del sistema de aguas les facilitó un terreno y comenzó la construcción de un pozo de agua que tiene como objetivo el surtimiento del vital liquido a las tres comunidades antes referida.
Se trata informaron de un proyecto hidráulico de varios millones de pesos, pues además del pozo comprende una gran red de distribución la construcción de cárcamos, “tan sólo la construcción del pozo comprende una inversión de casi 9 millones de pesos”, indicó Roberto Andrés.
Sin embargo, dijo que aún cuando este predio fue otorgado mediante la documentación respectiva, surgió el comisariado de bienes comunales, José Luis González, quien se opuso al proyecto y promovió un amparo acusando de invasión de tierras.
De tal suerte mencionaron que esta oposición ha puesto en duda la realización del proyecto y aunque cumplen con todos los requisitos, temen que pueda echarse atrás y de esta manera propiciar un conflicto, pues seis mil habitantes se quedarían sin el servicio de agua potable.
“Este problema puede crecer y llegar a una revuelta social, ya que los pobladores de las comunidades beneficiadas van a insistir en el proyecto para que les llegue agua a sus hogares, y seguramente habrá otra parte que quiera cancelar el pozo”, dijo el declarante.
Ante ello hicieron un llamado a las autoridades respectivas para que el proyecto no se cancele y pueda hacerse una realidad, ya que de lo contrario habrá problemas sociales fuertes, “no queremos que esto pasé a mayores, es decir un conflicto por agua”, finalizó Roberto Andrés.