En los dos años de la pandemia de Covid-19, los divorcios aumentaron 36.1% en el Estado de México.
De acuerdo con estadísticas del Tribunal Superior de Justicia de la entidad, entre 2020 y 2021, los juicios de divorcio aumentaron de 33 mil 767 a 45 mil 959. Cabe mencionar que estos datos no incluyen los juicios en línea.
La psicóloga Guadalupe Téllez Dorantes indicó que el aislamiento, derivado de la contingencia sanitaria, ha generado una activación emocional elevada y ha ocasionado alta irritabilidad, además de síntomas de estrés y ansiedad en los matrimonios.
La especialista de Ayuda del Centro Psicológico del Tecnológico de Monterrey, campus Atizapán, explicó que actualmente un detonante de problemas matrimoniales es el compartir todo el tiempo el mismo espacio físico, sin tener más zonas o áreas donde interactuar.
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“La interacción con los hijos y el esfuerzo físico, emocional y mental que conlleva la tarea de ayudarles a cubrir necesidades como el juego y las labores escolares pueden limitar el tiempo individual y de pareja, generando situaciones de tensión e incrementar el estrés”, asegura la especialista de este plantel.
Por otro lado, la psicóloga Laura Trejo comentó que, entre otras secuelas, la pandemia provocó problemas económicos entre las parejas.
Hubo muchos factores, desde estrés, problemas económicos, angustia, desesperación.
A través de su artículo “Deterioro de las parejas debido al confinamiento”, publicado en una revista universitaria, el psicólogo Diego Noel Pineda Juárez, adscrito a la Clínica Multidisciplinaria de Salud de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), explicó que derivado de las restricciones sociales a causa de la pandemia, las parejas se han visto afectadas seriamente en el vínculo emocional, tanto las que viven juntas como aquellas que se encuentran en casas separadas.
El especialista mencionó que las parejas que llevaron juntas esta etapa presentaron muchas dificultades, al pasar tanto tiempo en el mismo lugar; incluso, dieron fin al vínculo amoroso. Ante esta situación, el especialista aconsejó que quienes estén en esta situación busquen ayuda psicológica para mantener su relación.
Advirtió que quienes afrontaron la contingencia sanitaria por separado se enfrentaron a otro tipo de conflictos, como el que la demostración de sentimientos, a través de besos, caricias y abrazos, se vio interrumpida al estar físicamente en sitios diferentes. Por tanto, las parejas recurrieron a la práctica del sexting para satisfacer su necesidad de afecto.
Soluciones
Para conservar una relación estable, Téllez Dorantes recomienda a las parejas comenzar a recordar elementos esenciales que en inicio les unieron.
“Conversar, compartir, recordar, disfrutar y proyectar aquello que en un principio les unió, es una manera maravillosa de estimular el sistema límbico, la zona del cerebro que regula las emociones y donde se encuentra el aprendizaje de esos eventos significativos”, aconseja Téllez Dorantes.
Menciona que una rica copa de vino, una buena música, serían un excelente recurso para salir un poco de la rutina y reencontrarse con la magia.
La especialista consideró que es importante identificar emociones complejas como el enojo, el disgusto, la tristeza y la frustración en las parejas; sin embargo, observar, abrazar y no juzgar son emociones que pueden darle a las parejas herramientas y experiencias que permitan sobrellevar la vida de encierro.
Por otro lado, recomienda, independientemente del momento que atraviese cada pareja, llevar un registro de aquello que hacen juntos, es decir, de momentos que les agraden y posteriormente durante el fin de semana compartirlos, para realizarlos juntos y así fomentar buena comunicación. (Con información de Rodrigo Miranda, Patricia Venegas, Arturo Aguilar y Orlando Salinas)