Toluca, México.- El derecho de los niños a decidir si es adoptado por una pareja homoparental o heterosexual es un tema reciente que avanza en el país, no obstante, al menor podría colocarlo en un dilema por el significado y lo que representa, señaló el coordinador de vinculación de la organización Democracia y Sexualidad A.C., Alexis Sorel.
En entrevista, el psicólogo, especialista en Adolescencia y Educación Sexual, expresó que si bien es cierto la familia y la adopción son un derecho de los niños y adolescentes, pero resulta complejo para el menor elegir un tipo de familia porque aun no ha alcanzado un desarrollo pleno, en el sentido de “¿qué implica una pareja homoparental y qué implica la homosexual?”.
El especialista del Foro de discusión sobre “Matrimonio igualitario en el Estado de México”, destacó que de acuerdo al Interés Superior del Niño, este le da voz a los menores, el cual podría darse a partir de los cinco años de edad.
Plantearle a un niño de cinco años de edad si decide estar con una familia con dos papás o dos mamás, es meterlo en un dilema porque él no comprende qué implica
Sin embargo, más allá del tipo de matrimonio o pareja, ya sea del mismo sexo o heterosexual que adopte a un infante o adolescente los solicitantes deberán cumplir con los requisitos para en materia emocional, económica y social con la intención de brindarle un estado de bienestar.
Con lo anterior, afirmó se buscaría cumplir con el Interés superior del Niño al otorgarle un estado de bienestar en general y no preguntarle salvo se trate de un adolescente porque él podría tener un panorama más amplio.
En el desarrollo infantil, sostuvo lo importante es forjar una relación fuerte de bienestar, de afecto y de cariño entre padres e hijos.
Ejemplificó un niño de cuatro o cinco años de edad podría plantearse ellos -personas del mismo sexo- me pueden dar cariño, afecto y yo me siento compaginado con ellos, pero no si los quiero o no por su orientación sexual.
Al momento, apuntó, la mayoría de las valoraciones se hacen desde un modelo heterosexual y es difícil comprender si existen diferencias aunque hay familias conformadas solo por mujeres, la mamá, la abuela y la hija.
Se ha argumentado que la adopción homoparental va en contra de los derechos de los niños, pero estudios realizados de hace una década en México, España y Estados Unidos han demostrado este tipo de familias han permitido consolidar algunos valores como la tolerancia, la libertad e igualdad.
De acuerdo a testimonios de esos documentos los hijos de matrimonios de cónyuges del mismo sexo declaran no sentirse incómodos por esa condición por la apertura en la sexualidad y su diversidad, refirió.
En contra parte, opinó existen matrimonios heterosexuales en donde persisten altos índices de violencia intrafamiliar.
Exhortó a derribar mitos sobre las familias homoparentales porque no incide en que sus hijos puedan sean homosexuales o violentos.
La responsable de la Red de democracia y sexualidad, Sandra Mejía en el Foro comunicó que México pertenece desde 1990 a la Convención de los Derechos del Niños en donde se reconoce a niños, niñas y adolescentes como sujetos a vivir en familia.
Niños y niñas tienen derecho a una vida en familia, la misma convención de los Niños establece el derecho de niños y niñas a tener una familia, sin embargo no define qué tipo de familia debe tener
Añadió el documento no especifica el derecho a un papá y una mamá, a dos papás o dos mamás, sino por el contrario obliga al estado a que reconozca cualquier tipo de formación familiar y a garantizar que la familia en todos sus tipos o figuras cumpla su función.
El interés superior del Niño, aclaró no es un concepto en general sino se aplica en el sentido de qué le conviene más al niño, al citar a uno que vive en Toluca, no será el mismo interés a un menor que reside en la colonia Roma de la CDMX.
En ese contexto, se tiene que hacer estudios diversos con especialistas, trabajadores sociales y psicólogos.
