Esa fue la frase con la cual un padre de familia le gritó a su esposa quien no se daba abasto de acarrear aguas y refrescos luego de que el ferrocarril impactó a un tráiler de una empresa refresquera y una infinidad de mercancía quedara regada sobre la avenida.
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El accidente ocurrió alrededor de las 10: 40 horas en el cruce de Paseo Tollocan y avenida Comonfort cuando el conductor de un tráiler de doble caja cruzaba las vías del tren y, pese a que escuchó el sonido de la locomotora, quiso ganarle el paso pero no lo logró.
Como resultado, parte de la mercancía del tráiler se desparramó y ello provocó la llegada de decenas de curiosos cuyo número fue creciendo poco a poco.
“Iba en el autobús cuando de repente se escuchó un fuerte impacto, la verdad todos nos asustamos y yo opté por bajarme del transporte. Al caminar unos metros, vi como el tren había impactado a un tráiler de doble remolque cargado con refresco, aguas y jugos”, dijo una testigo de los hechos que se dirigía a la zona centro de Toluca.
En cuestión de minutos el lugar se llenó de taxistas, trabajadores de la zona, vecinos del lugar y hasta familias completas que se encontraban realizando alguna actividad en este crucero.
Mientras elementos policíacos resguardaban el lugar, algunas personas comenzaban a llevarse las botellas de refresco y aunque las órdenes de los uniformados detenían los actos de rapiña, poco a poco llegaba más gente al sitio del accidente.
La contención no duró mucho ya que un inspector de la empresa refresquera arribó al lugar, analizó la situación y dio la orden para que se llevaran los productos “ya dejen que se lleven la mercancía regada”, acto seguido los presentes se arremolinaron y comenzaron a cargar la mercancía.
Muchos se llevaron refrescos, jugos y aguas en cajas, otros en la cajuela de vehículos, en motos, y hasta en su rebozo, “apúrate, llévate eso y regresas, mientras aquí te espero”, le decía un joven a un motociclista que ya llevaba mercancía.
-¿A poco no les da pena?, les reclamaban algunos ciudadanos a quienes a manos llenas se llevaban las botellas de agua.
-Por qué pena, si nos dieron permiso, contestaba una mujer que cargaba en su rebozo y cajas diversos productos.
Poco más de media hora duró la mercancía derramada por el accidente automovilístico, aunque todavía llegó más gente que esperaba durante las maniobras de retiro, cayeran más botellas para llevárselas a casa o a su trabajo.
Finalmente la unidad de carga fue retirada del lugar y elementos del H. Cuerpo de Bomberos y de Protección Civil, retiró los restos que quedaron regados sobre la vía.