Debido al bloqueo que mantienen los habitantes de la comunidad de Acazulco en la carretera Toluca-Naucalpan, cientos de personas que se dirigen a la Ciudad de México se encuentran varadas y sin tener certeza si llegarán a su destino.
Por una parte, los comuneros de esta localidad perteneciente al municipio de Ocoyoacac protestan por la declaratoria de expropiación de los terrenos que hoy ocupa el tren Interurbano México-Toluca, el cual ampliará su servicio hasta Santa Fe, en la CDMX, el día de mañana. Por otra, en la vía se encuentran detenidas cientos de personas que tenían planeado acudir a la capital del país para realizar diversas actividades como citas médicas y la escuela; sin embargo, parece ser que esto no ocurrirá.
Durante la movilización, algunos conductores intentaron dialogar con los comuneros para pedirles comprensión de su situación; sin embargo sólo encontraron la negativa rotunda por parte de los manifestantes: “como tú tienes obligación, nosotros también”, le respondió uno de los habitantes de Acazulco a un automovilista que argumentaba que tenía una cita médica, al mismo tiempo otra persona gritaba a sus compañeros: “ya no dialoguen”.
En el mismo lugar, una mujer fue enterada del fallecimiento de su padre en la Ciudad de México y debido a que está varada, no podrá llegar con su familia; en tanto, otra mujer, con boleto en mano, se quejó por perdió su vuelo a Huatulco.
La protesta comenzó antes del mediodía de este viernes y pasadas las 13:00 horas, la kilométrica fila de vehículos llegaba hasta el municipio de Lerma; mientras tanto, los habitantes de Acazulco advierten que no se moverán hasta tener una respuesta de las autoridades.
Durante meses recientes, los bloqueos en diferentes vías del Estado de México han sido una constante y los motivos diversos: falta de agua, pagos de tierras, ubicación de personas desaparecidas y hasta la petición de liberación de personas en prisión.
Algunos usuarios consultados, consideran que las causas de las protestas son “legítimas”; sin embargo las afectaciones colaterales son evidentes. Incluso, el sector empresarial, en ocasiones pasadas, han señalado que este tipo de manifestaciones han dejado pérdidas millonarias, aunado a los incontables casos de personas que han perdido citas médicas o faltado a su trabajo y la escuela.