En Valle de Bravo, autoridades municipales buscan mejorar el procesamiento de la basura que diariamente se genera en el pueblo mágico para que el relleno sanitario no se convierta en un vertedero de basura, sino en un lugar en el que se potencialice el uso de los desechos.
El relleno sanitario de Valle de Bravo se encuentra ubicado en los límites territoriales con el municipio de Temascaltepec, y está a cargo de la Dirección de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Valle de Bravo.
Desde octubre de 2019, se han adoptado medidas para asegurar que en el relleno sanitario se potencialice el uso de los desechos orgánicos e inorgánicos.
Entre estas medidas se encuentran los controles de acceso, los cuales registran el número de unidades que llegan a dejar los residuos, teniendo un promedio de 75 a 80 toneladas de basura depositadas diariamente en el relleno sanitario.
También, implementaron el área de separación de orgánicos de forma manual y el área de tiro selección en la que participan 30 familias para valorizar la parte inorgánica.
De esta valorización, las familias han podido recuperar cartón, pet, vidrio, plástico soplado y duro, aluminio y fierro para comercializar, beneficiándose económicamente.
Dos terceras partes de esta recuperación comercial de los desechos inorgánicos se queda directamente en la economía de estas familias, el tercio restante es destinado para el relleno sanitario pueda cubrir las cuotas de mantenimiento y sus propias necesidades.
“Lo que nosotros pretendemos y queremos hoy, es presumir abiertamente y públicamente que todo el personal que está aquí, en el relleno sanitario, está trabajando bajo la norma y con las condiciones dignas de operación” comentó Mauricio Osorio Domínguez, alcalde de Valle de Bravo.
Estas estrategias buscan garantizar la sustentabilidad del lugar con esta nueva forma de concebir a la basura.
Con los residuos orgánicos se han hecho capaz de composteo, es decir, se trata de transformar los residuos orgánicos en material para composta utilizada en la agricultura y floricultura, de esta forma se entierra lo menos posible de basura.
A espera de los estudios que aseguren el valor nutrimental de la composta que se está haciendo en el relleno sanitario, en el próximo mes de mayo se tendrá la primera producción de composta con la basura orgánica que se empezó a tratar por especialistas en la materia.
Por último, se implementó una “fosa de lixiviados” en la que descomposición aerobia hace que se evaporen los ácidos y no se viertan directamente al suelo y subsuelo.
Estas estrategias han sido implementadas por las autoridades municipales, sin embargo, la ciudadanía también puede ayudar con la separación de basura en orgánica e inorgánica, ya que al llegar al relleno sanitario se tiene la parte de selección que haría más fácil el proceso para quienes estén ahí.
“Que nos ayuden, aunque no esté ahorita las rutas recogiendo de manera separada lo orgánicos con lo inorgánico, pero que ya lo hagamos desde los hogares, si lo hacemos desde los hogares, aunque llegue en el mismo camión pero ya llegan separados, aquí nosotros hacemos el trabajo porque ya se está separando y procesando de manera distinta lo orgánico de lo inorgánico, de tal manera que le podemos dar más tiempo de vida a la fosa donde se confina la basura” pidió el edil vallesano.
Esta fosa es dónde se entierra la basura con el proceso correcto para crear la composta, de tal manera que primero se coloca una capa de basura cubierta por una de tierra, y así sucesivamente, incluso, se colocan escapes de gases conforme a la norma que así lo exige.
Por último, Mauricio Osorio dijo que próximamente se implementarán las rutas de recolección de basura por su tipo y clasificación, para que los camiones recolectores ya hagan la separación de los desechos antes de ingresar al relleno sanitario.
“Posteriormente estaremos haciendo las rutas por orgánico e inorgánico” aseguró el alcalde de Valle de Bravo.