Los operativos para impedir reuniones masivas durante la actual pandemia en Ecatepec, Estado de México, se intensificarán ante el riesgo de contagios por la tercer oleada.
Así lo informó el gobierno municipal, el cual apuntó que desde el inicio de la pandemia por el virus SARS-CoV-2 no han cesado los operativos.
Desde julio del 2020, informó Victoria Arriaga, titular de Protección Civil, la Célula Covid-19 ha realizado 228 operativos donde se han cancelado 687 fiestas y se dispersaron alrededor de 38 mil 680 personas. Además, se verificaron 972 establecimientos comerciales y se colocaron sellos de suspensión a 742.
El pasado fin de semana canceló un baile sonidero y varios establecimientos con música y venta de alcohol donde se encontraban jóvenes que no acataban las medidas sanitarias.
“A mis papás y abuelitos ya los vacunaron, no veo problema en que los jóvenes salgamos a divertirnos. Al fin ya no hay riesgo que se contagien”, es el pretexto más usado en la población juvenil que sin protección sigue acudiendo a fiestas clandestinas.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), el último censo de población indica que en Ecatepec habitan un millón 645 mil 352 habitantes y continúa en los primeros lugares de personas contagiadas y fallecidas en la entidad.
Cifras de la Secretaría de Salud del gobierno federal indican que en el municipio, desde el inicio de la pandemia, se han contagiado 35 mil 733 personas y han fallecido 5 mil 380. Desde que comenzaron las jornadas de vacunación contra la Covid-19, en febrero de este año, se han contagiado 6 mil 992 personas y han fallecido mil 342.
El ayuntamiento indicó que en la Célula Covid-19 participa personal de Protección Civil y Bomberos, Desarrollo Económico, Médicos del área de Salud del DIF municipal, de la Coordinación de Mercados, Tianguis y Vía Pública, quienes se apoyan con elementos de la Policía Municipal y la Guardia Nacional (GN).
A principios de diciembre del 2020, ante un repunte de contagios y decesos, debido a la segunda oleada del coronavirus, el alcalde Fernando Vilchis Contreras anunció el regreso de la localidad al Semáforo Rojo.
Se tomaron varias medidas, entre ellas el ajuste de horarios de funcionamiento y la disminución a 20 por ciento del aforo de establecimientos comerciales, así como el cierre de panteones, iglesias, deportivos, parques y espacios públicos, así como la suspensión de posadas, fiestas y celebraciones patronales.