Como cada 2 de febrero, en el municipio de Valle de Bravo se celebró el Día de la Candelaria con rituales de la religión católica que conmemora la presentación en el templo de Jesucristo.
Las festividades patronales comenzaron desde temprano con la eucaristía de Aurora en el barrio de Otumba, en la cabecera municipal de Valle de Bravo, celebrada en honor a la Virgen de San Juan.
Posteriormente, a mediodía, se llevó a cabo una procesión de la imagen del Niño Dios desde la calle de Alfareros hasta la capilla de la Virgen Otumba, para bendecir a Jesús después de 40 días de nacido.
Durante la liturgia celebrada por el párroco de Valle de Bravo, Miguel Angel Saldaña, se recordó la presentación del hijo de la Virgen María en el templo, encendiendo cirios y velas que serán la luz de los hogares durante el bautismo del hijo de Dios.
Las celebraciones por la presentación del Niño Dios continuaron en los templos de Santa María Ahuacatlán y en la parroquia de San Francisco de Asís, donde, después de llevarse a cabo procesiones con dicha imagen, se bendijeron a los asistentes.