El Bicentenario de la Erección del Estado de México se vivió este sábado entre la vieja política priísta y quienes integran el nuevo gobierno, que por primera vez encabeza Morena.

En palacio de Gobierno, en una ceremonia austera, con invitados vestidos en su mayoría de colores sobrios, se celebró el aniversario mexiquense.

Ahí, la gobernadora Delfina Gómez Álvarez, la primera mujer gobernante en la entidad y la primera de oposición, entregó las preseas Estado de México 2023.

Los ex gobernadores de la entidad fueron sentados en un extremo. Todos con rostro serio: Arturo Montiel Rojas, Emilio Chuayffet Chemor y Eruviel Ávila Villegas, quien ya no forma parte del PRI y recientemente se fue al Partido Verde. Se notaban distanciados. El gran ausente fue Alfredo del Mazo Maza, quien apenas en septiembre dejó el cargo.

La ceremonia, que tradicionalmente se realizaba en el Teatro Morelos, como festejo del Estado de México, y a la par, de la clase política priísta, esta vez se realizó en el patio central del Palacio de Gobierno, sin el lucimiento de personajes del Revolucionario Institucional.

Algo impensable en otro gobierno, que marca parte del sello del nuevo gobierno fue entregar la presea A LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS “JOSÉ MARÍA MORELOS Y PAVÓN” a Diana América del Valle Ramírez, hija de Ignacio del Valle, líderes del movimiento que surgió contra la intención de construir el aeropuerto en el lago de Texcoco en los gobiernos de Vicente Fox Quezada y Arturo Montiel Rojas.

En el evento oficial, cuando Del Valle recibió la presea, resonaron los gritos de: “Atenco vive, la lucha sigue”, en medio de rostros serios, como el de Montiel Rojas y las y los diputados del PRI.

En el evento, por primera vez, representantes de los tres poderes ofrecieron mensajes: la diputada Beatriz García Villegas, vicepresidenta de la Legislatura local, y el titular del Poder Judicial, Ricardo Sodi Cuéllar, quien dio una cátedra de la historia de la erección del Estado de México.

La fiesta tampoco fue guinda porque la veda electoral, derivada de las campañas federales, impuso colores neutros a los mensajes de celebración del Bicentenario.

Los exgobernadores Emilio Chuayffet y Arturo Montiel, salieron presurosos por la parte trasera, entre pocos saludos, sin los seguidores de otros años, mientras al otro extremo, la gobernadora Delfina Gómez era el personaje central: saludada y arropada por decenas de asistentes.

En palacio de Gobierno, el primer festejo del aniversario de la erección del Estado de México de este 2 de marzo dejó de ser rojo y dejó de ser priísta.