La reapertura de los panteones reactivó la venta de ceras por kilogramo en uno de los sitios más tradicionales de la zona centro de Toluca, sobre la calle de Jesús Pedraza, a un costado del mercado 16 de septiembre, lugar donde de ubican varias cererías
Y si bien, este año los clientes regresaron para adquirir este producto, la crisis económica ocasionó que solo hayan comprado hasta la mitad de lo acostumbrado. En promedio, señalan los locatarios, la compra había sido de 10 kilogramos por familia y este año la adquisición llegó a cinco kilos o un poco menos.
“Muchos no dejan perder las tradiciones y costumbres”, asegura la dueña de la cerería San Miguel Arcángel.
Informaron que la cera de 3 ×1 (tres ceras por un kilo) es la de mayor demanda, le sigue aquella de 2x1 kilo y al final aquella de una pieza por kilogramo, sin embargo, aseguraron, este año han tenido una buena venta de aquella contenida en vaso.
Este año, los costos incrementaron de 65 a 75 pesos para la cera de 3x1 kilo.
Al hacer un comparativo sobre las ventas de años anteriores, los comerciantes de cera señalaron que este año la venta llegó a un 40%, en comparación con el año pasado, pero nada comparado con el tiempo prepandemia.
Asimismo, esperar para poder surtir el producto pues los productores dosificaron la entrega debido a la escasez en el suministro de materiales.
La cereria de la familia Araujo Aguilar resaltó sobre la escasez de producto debido a que sus pedidos llegaron de forma dosificada.
“Hacíamos el pedido y no llegaba completo, estaba escaso, y por ello no se pudo surtir toda la parafina de mayoreo”, dijo el dueño de la cerería Nuestra Señora del Carmen.
Para Elizabeth Aguilar, dueña de otra de las cererías ubicada sobre Gómez Pedraza, la tradición de velar en Día de muertos sigue vigente.
“La tradición es alumbrarlos para que ellos lleguen rápido a su camino, a su destino, todo eso tiene su significado, y por eso se sigue la tradición", señaló.
Mencionó que en la etapa prepandemia, las ventas en su negocios llegaban a un promedio de seis a ocho toneladas en temporada de Día de Muertos, y este año, ha desplazado alrededor de tres toneladas, pero aún espera las primeras horas de este 1 de noviembre para elevar un poco más la venta.
Los comerciantes atribuyen las compras mínimas de sus clientes a la complicada situación económica.
“aunque seas de poquita, pero si llevan”, comentan.
Para los comerciantes, el fin de semana y este lunes fueron los días de mayor venta y por fortuna, la mayoría ha desplazado casi todo su producto, pues se anticiparon en no adquirir grandes volúmenes por la situación económica.
También mencionaron que la mayor de sus clientes provienen de localidades como Santa María del Monte, en Zinacantepec e incluso, algunos llegan desde el municipio de Huixquilucan, Naucalpan y de la Ciudad de México.
Otros más llegan de Ixtlahuaca, y municipios de la zona sur como Tejupilco, Amanalco, San Josè del Rincón y Villa Victoria. Y aseguraron, en Toluca, prevalece la compra de velas en vaso.