Cicloactivista recorre la República Mexicana para fomentar la paz

Asegura el Edomex ha sido la única entidad donde prácticamente le han cerrado las puertas

Por Elizabeth Ríos

  · domingo 5 de noviembre de 2017

Foto Elizabeth Ríos

Toluca, México.- Por más de un año, Jesús Márquez Martínez ha recorrido gran parte de la república mexicana para fomentar la paz, sin embargo aseguró que hasta este momento solo en la entidad mexiquense le han cerrado las puertas al momento de buscar pasar su mensaje a alumnos de nivel básico.

Márquez Martínez precisó que su principal actividad en su travesía por territorio nacional es acudir a escuelas secundarias a dar mensajes de paz y como fomentarla, pues asegura las nuevas generaciones permitirán crear la base de una sociedad libre de corrupción e inmersa en la paz, no obstante lamentó en la entidad mexiquense autoridades estatales y municipales no demuestren el interés necesario.

"Hay varios municipios en otros estados en donde mandan a gente a acompañarme a las escuelas, en Guanajuato, en Michoacán, en Tabasco y Tamaulipas, hay otros donde yo llego directamente a las escuelas y me reciben sin problemas, pero aquí en todo el Estado de México definitivamente no ha habido respuesta ni de las escuelas ni de las autoridades, y vaya que le he intentado de todas formas pero no ha habido manera", aseguró el ciclista de la paz.

Detalló que el primer argumento que recibe por parte de autoridades educativas y estatales es que debe esperar entre quince y veinte días para recibir una respuesta positiva o negativa, tiempo que dice no tener para esperar.

 "Quiero llegar a un mayor número de personas y si me espero a que me den respuesta ellos pues no logro lo que realmente quiero hacer, permanezco muy poco tiempo en un estado porque estoy en constante movimiento". Jesús Márquez, de 49 años de edad y originario de Mixquiahuala de Juárez, estado de Hidalgo, ha permanecido fuera de casa desde hace un año, dos meses y cuatro días, tiempo en el que las centrales de autobús, refugios e incluso el cielo abierto, han sido su techo para resguardarse durante la noche, mientras que la caridad de la gente se ha convertido su principal fuente de ingreso para alimentarse y sobrevivir.

"Más que ciclista soy activista, me denominó a mí mismo como cicloactivista y quiero que la paz predomine, que se acabe la guerra y todo ese tipo de cosas que lejos de hacernos crecer como seres humanos nos destruye, y qué mejor que fomentar está paz en las generaciones jóvenes, ellos son los que nos deben de preocupar", finalizó.

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