En los últimos tres meses se han clausurado 36 establecimientos dedicados a la venta de alcohol de manera irregular y que operaban cerca de la ENEP Acatlán, CCH de Naucalpan y otras escuelas.
El subdirector de Normatividad Comercial del gobierno local, Francisco Ramírez Ruiz, explicó que estos comercios conocidos como chelerías vendían alcohol de manera irregular a estudiantes y no contaban con los requisitos oficiales para su funcionamiento.
“De febrero a la fecha se suspendieron 36 establecimientos que vendían alcohol de manera irregular, en operativos para evitar la venta de bebidas embriagantes a la comunidad estudiantil”, indicó.
Además, las inspecciones se efectúan para verificar que los comercios cuenten con las licencias de funcionamiento correspondientes y evitar que en dichos establecimientos los menores de edad y jóvenes consuman bebidas alcohólicas y pongan en peligro su integridad y salud.
El funcionario especificó que la colonia en donde más establecimientos conocidos como chelerías clandestinas se han suspendidos son: Lomas de San Agustín, con siete comercios, entre los que destacan Los Venaditos, Restaurante Bar Itzahanna, Juquila, Las Toxic@s, y otros que no cuentan con denominación.
Refiere que estas acciones se han implementado también en fraccionamientos residenciales como El Parque, Jardines de San Mateo y Bulevares, además de los pueblos de Santa Cruz Acatlán, Naucalpan centro, San Antonio Zomeyucan y San Juan Totoltepec, donde también se han suspendido comercios con venta de alcohol.
Vecinos piden más operativos
“Uno de los problemas que más aquejan a la colonia de los Remedios en Naucalpan es el consumo de alcohol en la vía pública, principalmente en estudiantes del CCH”, expresó Juan Manuel García, vecino de la localidad.
Llamó a las autoridades municipales a prohibir definitivamente la venta de bebidas embriagantes en la colonia, “porque desde las 8 de la mañana ve usted a jóvenes completamente alcoholizados y drogados en las banquetas”.
Dijo que el problema se presenta casi todos los días, pero con mayor frecuencia los fines de semana, aunado a esto, los lugares donde venden las bebidas embriagantes lo hacen a altas horas de la noche y es ahí mismo donde estos jóvenes aprovechan para consumirlas.