La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) reitera al Juez de Distrito responsable del proceso penal en contra de la activista Kenia Inés Hernández Montalván su obligación de respetar los principios de debido proceso y plazo razonable para dictar la sentencia que corresponda..
Recordó al Juez de Distrito Especializado en el Sistema Acusatorio Oral Penal, del Centro de Justicia Penal Federal del Estado de Guerrero, con residencia en Acapulco, los criterios establecidos para la razonable duración del proceso contra la coordinadora del colectivo “Zapata Vive”.
Señaló que, de acuerdo con la Corte Interamericana de Derechos Humanos y el artículo 8 de la Convención Americana, el proceso debe medirse con base en factores como la complejidad del caso, la conducta del inculpado y la diligencia de las autoridades competentes en la conducción del proceso.
Es de recordar que la activista Kenia Hernández fue encarcelada en tres ocasiones este año, las dos primeras en el Estado de México señalada como responsable de robo con violencia; la tercera, por la autoridad federal bajo el cargo de ataque a las vías generales de comunicación.
La CNDH también destaca la importancia de que el referido Juez de la Causa respete el principio de debido proceso, basado en los parámetros normativos del derecho internacional bajo los cuales deben dispensarse todas las garantías necesarias en el proceso.
Lo anterior, toda vez que el debido proceso es un derecho humano que debe ser garantizado por Estado y su deber de organizar su estructura, con instancias procesales que permitan a las personas estar en condiciones de defender sus derechos ante cualquier acto de autoridad que pudiera afectarlos.
Por ello, la CNDH insistió en el respeto a las garantías mínimas del debido proceso, garantizando el conjunto de requisitos legales que deben observarse en las instancias procesales, en aras de que todo individuo se pueda defenderse ante cualquier acto emanado del Estado que pueda afectar su esfera jurídica.
Aseguro que continuará atenta a la evolución de los acontecimientos con el objeto de garantizar un irrestricto respeto y protección de los derechos humanos de la activista.
La defensoría también garantizó su compromiso con las personas defensoras de derechos humanos para crear un frente común en el fortalecimiento de un Estado justo y democrático.