Debido a que se encuentran dentro del sector de riesgo ante la pandemia del Covid-19, los adultos mayores pueden presentar con mayor facilidad problemas de ansiedad, estrés y hasta depresión durante el confinamiento, expresó la doctora Adela Hernández Galván, profesora investigadora del Centro de Investigación Transdisciplinar en Psicología de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
Durante la conferencia “Depresión en el Adulto Mayor” impartida por la especialista a través de Facebook Live de Asofarma Neurociencias, explicó que el aislamiento social debido a la pandemia del SARS-CoV-2 afectará de diferente manera a las personas de la tercera edad, según la edad que tengan, su sexo, el entorno en el que se desenvuelvan, si viven solos o acompañados y el tipo de personalidad previa.
Al referir que el confinamiento afectará a todos los adultos mayores, sin excepción, la maestra en Neuropsicología por la UAEM expuso que entre los principales síntomas de afectación destacan el temor al contagio de Covid-19, las dificultades económicas, el aburrimiento, la sensación de soledad, depresión, irritabilidad y hasta conflictos familiares.
Por lo anterior, las personas de la tercera edad podrán experimentar una mayor dificultad para adaptarse a los cambios, menor flexibilidad cognitiva, disminución en su capacidad de inhibición y dificultades a la hora de tomar decisiones.
Depresión en los adultos mayores
De acuerdo con la psicóloga Adela Hernández, se estima que el 41% de los adultos mayores viven solos, situación que puede aumentar su percepción de soledad.
En este contexto, mencionó que el hecho de que los adultos mayores presenten mayor dificultad para comunicarse con otras personas a través del uso de tecnologías de la información y comunicación, podrían detonar aun más esa sensación de soledad o abandono por el que atraviesan durante el confinamiento.
En consecuencia, lo ideal es que se mantengan ocupados, que realicen actividad física y procuren mantenerse en contacto con sus familiares y amigos, pues de lo contrario, podrían caer en depresión.
La especialista detalló que las personas que perdieron a su cónyuge o un ser querido importante en los últimos 3 años, sobre todo en el último año, son los más susceptibles a caer en depresión.
A estos se suman quienes se encuentran en recuperación de cirugía o enfermedad médica, los que presentan algún nivel de incapacidad, quienes no cuentan con un soporte social y aquéllos que viven en asilos o están hospitalizados.
Hernández Galván puntualizó que según estudios se estima que las mujeres son más propensas a padecer depresión durante su vejez, pero a partir de los 80 años éste padecimiento es más frecuente en los varones.
La depresión en los adultos mayores puede presentarse a través de sentimientos de vacío o tristeza, que se manifiestan por medio del llanto.
Quienes padecen depresión pueden ya no disfrutar de las actividades que disfrutaban antes; presentan cambios en el apetito, insomnio, fatiga o pérdida de energía, sentimientos de inutilidad o culpa y presentan dificultades para pensar, para concentrarse o tomar decisiones.
Además, tienen reiterados pensamientos de muerte y quejas somáticas (hipocondría).
Ansiedad en el adulto mayor
Los adultos mayores también son más propensos a sufrir de ansiedad durante el confinamiento, la cuál se manifestará a través malestar en general, hiperactividad o incapacidad de mantener una acción o un estado de ánimo por mucho tiempo y la sensación de inquietud interna.
A esto, los adultos mayores podrían presentar sensación de opresión en el pecho, hiperventilación, palpitaciones, dificultad para respirar, ganas de orinar frecuente, entre otros, detalló la especialista en neuropsicología.
Recomendaciones generales
Para evitar que los adultos mayores presenten ansiedad y depresión durante el confinamiento, es necesario establecer una rutina con horarios regulares para descansar y la alimentación, así como realizar actividad física, ejercicios de relajación y meditación, y que participen activamente en ejercicios socioculturales.
De acuerdo con la psicóloga Adela Hernández, para mantener la salud física y mental de los adultos mayores es importante que se cuente con información actualizada sobre su medicación y que se tenga un estricto control en este tema.
También se recomienda que por ningún motivo los adultos mayores estén incomunicados y que mantengan pensamientos de positividad.
En las recomendaciones también destaca que se limite el acceso a la información sobre la pandemia a los adultos mayores, pues la saturación de información podría causarles ansiedad y preocupaciones innecesarias.
