Toluca, México.- Los temblores ocurridos el pasado siete y nueve de septiembre, dinamitaron la necesidad urgente de contar con un sistema de Alerta Sísmica que lamentablemente hoy está “en pañales”, y aunque existe la propuesta de una ley para crear un Sistema Estatal de Alertas Tempranas y de Emergencia se encuentra congelada, mientras que los recursos recibidos en la materia se despilfarran en cursos, talleres o en la compra de cobijas y despensas contra el frío.
Al respecto, el presidente de la Comisión de Protección Civil de la Legislatura local, el diputado de Morena, Abel Valle, refirió que el pasado 22 de septiembre del 2016, planteó la necesidad de crear el Sistema de Alertas Tempranas y Emergencias del Estado de México (SATEEM), y contribuir con ello a disminuir la exposición de sus habitantes tanto en desastres naturales como a los provocados por el propio hombre o llamados comúnmente antropogénicos.
Explicó que el Estado de México cuenta con recursos del Fondo Estatal de Atención a los Desastres y Siniestros Ambientales o Antropogénicos que para el ejercicio fiscal de 2018 es de 500 millones de pesos, aunque desde la creación de este fondo la entidad mexiquense ha recibido recursos desde el año 2010.
Lo cierto, dijo, es que hasta la fecha no se sabe en qué se han invertido esos recursos, pues únicamente se habla de que el dinero asignado a Protección CIVIL se aplica a cursos de capacitación y atención de desastres, evitando invertir en prevención verdaderamente.
La iniciativa para crear el Sistema Estatal de Alertas Tempranas y de Emergencias del Estado de México, detalló se pretende fortalecer lo que el plan de desarrollo estatal de planteó bajó el denominado pilar de sociedad protegida ante desastres, sin embargo, no se ha hecho nada, por lo que consideró como una necesidad iniciar por lo menos con la primera este sistema.
“Tan sólo lo que se ha acumulado en el Fondo de Protección Civil desde 2010 es de más de mil 200 millones de pesos, pero no se sabe en qué se gasta, pues sólo cuando hay contingencia en el Nevado de Toluca se entregan despensas y cobijas”, asentó el diputado.
Detalló que al analizar el destino de algunos recursos recibidos para este fin, se puso al descubierto que 951 millones de pesos van a ir a parar a cursos, talleres y supuesto intercambio de información, cuando dicho sistema costaría 600 millones de pesos, inclusive la primera etapa costaría 300 millones de pesos que serviría para instalar alertas tempranas en los municipios más susceptibles de daños.
Creo, finalizó, que hay una falta de voluntad política y los gobiernos le apuestan a una cultura reactiva en vez de preventiva, cuando lo ideal es contar con las herramientas para que la gente se prevenga, “habría que revisar el plan de Desarrollo Estatal”, finiquitó.