Autoridades de los tres niveles de gobierno arrancaron con la obra para la construcción de una nueva red de alcantarillado sanitario en la comunidad de la Villa de Colorines, en el municipio de Valle de Bravo.
Y es que, ante la falta de infraestructura en el drenaje público de esta comunidad, las aguas grises y negras se vierten directamente en la presa de Colorines.
Misma que forma parte de la red de presas que conforman al Sistema Cutzamala, al ser un vaso regulador del agua almacenada en la presa Miguel Alemán Valdés, de Valle de Bravo.
Por ello, el gobierno federal, estatal y municipal harán la construcción y la rehabilitación del drenaje, colector y alcantarillado en la Villa de Colorines, que iniciará desde la comunidad El Durazno hasta la desembocadura de la presa.
Con el objetivo de mejorar la calidad del agua y restaurar el medio ambiente en este municipio, y en el agua que se potabiliza para la Ciudad de México.
"Para nosotros los vallesanos es importante que nuestro lago se encuentre al 100 por ciento, que tenga ese llenado óptimo, que esté limpio, pero sobre todo que de un buen aspecto", aseguró Michelle Núñez Ponce, presidenta municipal de Valle de Bravo.
La presa reguladora de Colorines se encuentra llena de lirio acuático debido a las descargas de aguas negras y residuales que se vierten de manera directa, sin tratar en una planta tratadora.
El lirio acuático genera el ambiente preciso para la reproducción de los mosquitos, los cuales provocan enfermedades que pueden transmitir al ser humano.
Además, la presa desprende un mal olor generado por la misma contaminación.
"Es una plaga de lirio que se ha venido año con año y que no ha mejorado ni un 5 por ciento, ha estado así, se ha descuidado, no se ha atendido,no se le ha dado la importancia que se requiere", aseguró la alcaldesa vallesana.
"Nos impacta de manera negativa a la economía del municipio el que tengamos que cancelar eventos como el triatlón que no se pueden llevar a cabo (por la contaminación de las heces fecales)", enfatizó.
Los trabajos concluirán en marzo de 2023, con lo que se espera mejorar la calidad del agua que hay en las presas de Valle de Bravo que pertenecen al Cutzamala.
Al respecto, Victor Javier Bourguett Ortiz, director general del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), aseguró que la falta de alcantarillado es una responsabilidad del gobierno municipal.
"Llegan las descargas de las aguas residuales, y culpables, podemos buscar, y está muy fácil buscar culpables".
"Por ejemplo, podría decir que todos los servicios básicos como alcantarillado y agua potable, el responsable, todos lo sabemos, está en la constitución, hay un artículo que dice que es el municipio, la Conagua no tendría por qué estar aquí en teoría resolviendo este tipo de problemas", precisó.
Sin embargo, participarán activamente en el proyecto, debido a la función que cumple la presa de la Villa de Colorines para la red hidráulica del Sistema Cutzamala.