Tener un vehículo en buen estado provee no solo movilidad sino seguridad para sus usuarios, así lo considera Mane Paredes, a quien el amor por la mecánica le nació cuando su padre le enseñó a cambiar una llanta.
En su pequeño taller ubicado en la colonia Los Héroes II, en la zona industrial de Toluca, Mane levantó un proyecto con el que busca romper estereotipos de género y empoderarlas a las mujeres a tener control sobre lo que necesitan sus vehículos.
Además de reparar autos en un lugar que rompe lo tradicional, pues incluso sus trapos son rosas, cada mes genera cursos para que sus clientas sepan desde cambiar una llanta hasta conocer y valorar los niveles básicos de un vehículo, como son los de aceite, anticongelante y líquido de frenos.
Fresca, ordenada y empoderarlas, Mane ofrece mecánica para mujeres y busca que cada vez menos conductoras sean estafadas cuando acuden a un taller.
“Mi papá fue muy cuidadoso de la seguridad de nosotros al manejar de traer los niveles en orden y pensé ‘¿para qué tengo todo eso?. Hice mucha introspección y trabajo personal para darme cuenta que esto tenía un propósito, compartir esto con las mujeres porque nosotras necesitamos sentirnos en un espacio seguro”.
Con su overol y su Mane Móvil, con el que atiende emergencias de automóviles en distintos puntos del Valle de Toluca, la emprendedora se distingue y busca ponerle un toque femenino a los restos de aceite y fierros que quedan tras una intervención.
“Me siento muy feliz de poderlo compartir porque si allá afuera te sorprenden o le haces y les haces y no queda tu coche, es falta de conocimiento porque esto de romper estereotipos no nada más es en el género, sino también en la forma de cómo venimos haciendo las cosas, no es lo mismo que el coche te falle a que sepas exactamente qué es lo que le falla”.
Convencida de que sus talleres de mecánica para mujeres ayudarán a muchas a saber cómo reaccionar ante una falla y sus posibles soluciones, aseguró que las puertas siempre las tiene abiertas para quien lo necesite.
Acompañada de su familia, su taller mecánico ha ganado impulso, aunque no es el único dirigido por una mujer, busca que cada vez sean más los espacios seguros para ellas, incluso entre tuercas, aceite, balatas y líquido para frenos.