Toluca, México.- El coordinador del PT en la Legislatura local, Carlos Sánchez defendió el nuevo impuesto del 4.5 por ciento a la venta final de bebidas alcohólicas en el estado de México y afirmó que el objetivo es proteger a los jóvenes, ante la reciente decisión de despenalizar la venta de bebidas con alcohol a los menores de edad.
Durante una entrevista, el legislador, autor de la propuesta de imponer el nuevo gravamen, explicó que una parte de los recursos que se recauden por ese concepto será para los municipios a fin de que atiendan el tema de adicciones, pues el 80 por ciento de los DIFs municipales no tienen psicólogo por falta de recursos y ha crecido el consumo de alcohol entre los jóvenes.
“Nadie cuando se implementó ese impuesto, ningún empresario salió a decir que iba a ser algo en bien de la sociedad y se espera que con los recursos apoyen a los municipios; parte de lo que se recaude se va a ir apoyar a los municipios”.
Reprochó que en su momento ningún empresario criticó la despenalización del alcohol, ni los riesgos de que aumentaran las adicciones y sostuvo que con el impuesto las bebidas alcohólicas solo las podrán pagar quienes trabajen, pero no los jóvenes. “Lo que estamos buscando con este tema es inhibir un tanto el consumo de alcohol para los jóvenes”.
También rechazó que ese impuesto abone a la ilegalidad, ni a la informalidad, pues afirmó que el impuesto se va a cobrar a la venta final, es decir, a los consumidores; no a los empresarios y reiteró que el tema es de salud.
“Buscamos que menos jóvenes tengan que estar en los hospitales, que menos jóvenes tengan accidentes y es a la venta final, es la que ellos no aceptan porque va a reducir el consumo, a lo mejor en lugar de tomarse una botella se van a tomar tres copas”, explicó.