Las lluvias de los últimos días provocaron el desbordamiento de la presa El Bordo en la comunidad de Santa María Citendeje, en Jocotitlán, lo cual afectó a casi 30 hectáreas de cultivo de maíz.
“Cuando se comenzó el siniestro inmediatamente Protección Civil municipal llegó hablar con la gente para evitar desgracias humanas porque existen algunas casas cercanas, se actuó en tiempo y forma” dijo el comisariado ejidal.
La presa tiene una capacidad de 300 mil metros cúbicos y con esa agua se riega de 90 a 120 hectáreas aproximadamente.
Campesinos de la zona y autoridades aseguran que esta es la primera vez en décadas que ocurre un siniestro de esta magnitud.
“La presa nunca había llegado al nivel máximo de su capacidad debido a que ha sido un mes o dos que ha estado lloviendo, pero en los últimos días se agudizó, la contención y la fuerza del agua hizo que se rompiera un segmento”, señaló la titular de la dirección Agropecuaria de Jocotitlán, Violeta Cruz.
Durante un recorrido se observaron los campos inundados producidos por las lluvias que no han dado tregua durante los últimos días, por lo cual funcionarios mexiquenses y municipales buscan apoyar a los productores afectados con el Programa de Apoyo a Siniestros Agroclimáticos del Campo Mexiquense (PASAME).
En el recorrido estuvieron presentes la titular de la dirección Agropecuaria de Jocotitlán, Violeta Cruz; Arturo Rebollar, en representación de la dirección general de Infraestructura Rural del gobierno estatal; el supervisor de obras de la delegación regional de Secretaria del Campo en Atlacomulco y el subdelegado de infraestructura rural de la misma secretaría en Atlacomulco.
El comisariado ejidal expresó que al ser una eventualidad natural está fuera del alcance de los productores y ahora se buscan las soluciones.
“Somos agricultores ahora no va a ver riego y de entrada las tierras están mojadas, pero denles 20 días y otra vez se endurece, son buenas tierras maiceras que requieren de humedad, lo sucedido sí nos afectó”.