La investigadora del Colegio Mexiquense, Natalie Rosales, afirmó que los acontecimientos ocurridos en El Chiquihuite, evidenciaron la vulnerabilidad en que se encuentran varias colonias, en el Estado de México, pero también es una alerta para emprender una reestructuración urbana bajo criterios de sustentabilidad.
Detalló que las imágenes de la población de la Colonia Lázaro Cárdenas, ubicada en Tlalnepantla, dan una idea clara de lo que es la vulnerabilidad urbana, que pone en riesgo la integridad física de los habitantes ante fenómenos naturales y humanos.
La especialista explicó que el crecimiento de zonas en las ciudades mediante la autoconstrucción y al margen de la planificación, es uno de los principales factores que contribuyen a la vulnerabilidad urbana.
“A los asentamientos irregulares en suelo inadecuado para su ocupación, como lo es el agrícola, la reserva ecológica, zonas inundables y de altas pendientes, se agregan la precariedad y el riesgo que se viven incluso en colonias ya consolidadas, pero que han crecido en zonas no aptas para el desarrollo urbano”, detalló, la investigadora del Colegio Mexiquense.
Especialista en planeación y sustentabilidad, Natalie Rosales dijo que de lo anterior es ejemplo de la colonia Lázaro Cárdenas en la Presa, pues se ubica en la ladera de un cerro y surgió al margen de toda planeación urbana, aun cuando con el tiempo se le ha ido dotando de servicios públicos e infraestructura.
En esta colonia, afirma, hay una mezcla de casas humildes, muchas de ellas construidas sin permisos, con edificaciones de hasta tres niveles, que pueden tener un valor significativo.
Además, algunas zonas tienen vialidades terciarias, cuya función primordial es dar acceso a los predios ubicados dentro de la colonia, “pero existen otras partes que sólo cuentan con escalinatas para acceder y pasillos para la circulación peatonal, lo cual dificulto más las labores de salvamento y rescate”.
Natalie Rosales subrayó la urgencia de aplicar soluciones de largo plazo ante el hecho de que la población que habita en esos entornos, siempre estará en situación de riesgo; “se debe evitar la actitud de, dejar hacer y dejar pasar". puntualizó.
La especialista adscrita al seminario de Estudios Estratégicos del Estado de México, está en favor de que se reestructuren las ciudades mexicanas, tomando en cuenta las limitaciones que imponen los factores ambientales a la vez de reducir la vulnerabilidad ambiental tanto como las condiciones irregulares de ocupación del suelo, mediante la construcción de un hábitat urbano que garantice la integridad física de las personas.