Toluca, México.- La inseguridad, basura, caos vial, baches y otros problemas que prevalecen en la Central de Abasto de Toluca, han ahuyentado a la clientela que cada vez viene menos a este zoco, denunciaron condóminos del lugar y por lo mismo exigieron a la actual administración brinde un informe real de lo que se hace con los recursos obtenidos.
Durante un recorrido efectuado por las instalaciones de esta Central de Abasto, condóminos que pidieron omitir su nombre por miedo a represalias, denunciaron que en estos cinco meses de gestión de la nueva administración, no ha habido resultados palpables, sino por el contrario, la imagen de este lugar se encuentra muy deteriorada.
Mencionaron que la inseguridad es uno de los mayores problemas que “cobijan” la zona y por lo mismo la clientela cada vez viene menos, “si viene la gente les abren su carro y los robos en el área de manojeo prevalecen, es más se ha dado el robo hasta de bodegas”, añadió uno de los denunciantes.
Detallaron que las calles además de que están llenas de baches, es un caos vial, pues pese a que existen señales de tránsito nadie las respeta, “aquí todos circulan por donde quieren hasta en sentido contrario, sin que ninguna autoridad haga algo, es un caos esto”, añadió otro quejoso.
También, mencionaron que la basura es otro de los problemas que no ha sido resuelto en la Central de Abasto, ya que las calles y avenidas están repletas de desechos, “hay basura por todos lados y no hay un servicio de limpia eficiente, eso también espanta a la clientela”, añadió un condómino.
Ante esta situación que, obviamente, dijeron, ha repercutido en la baja de la clientela, expresaron que pidieron a la actual administración convocar a una asamblea, sin embargo han hecho caso omiso y por lo mismo no se ha aclarado nada.
“Ellos son sólo administradores, no son dueños de la Central de Abasto, por eso exigimos que nos digan qué han hecho con los recursos generados y también que consulten a los condóminos sobre los proyectos que se van a hacer, pues todo tendría que ser con el consenso de cada uno de los integrantes de esta central”, agregó otro quejoso.
Finalmente también denunciaron que el templo católico que existe en este lugar fue cerrado y por lo mismo el sacerdote que se encontraba fue despedido, “antes el templo estaba abierto para que no sólo los que vivimos del comercio pudiéramos orar, sino también los clientes, pero ahora hasta de eso se apropiaron”, finalizó otro condómino.