Elizabeth Contreras Ramos, presidenta honoraria del DIF-Acolman, quien el pasado miércoles falleció por Covid-19, fue despedida entre música de banda y mariachi.

Alrededor de las 13:00 horas de este jueves, acompañada por los sonidos de sirenas del parque vehicular del ayuntamiento de Acolman y música de banda, arribó a las instalaciones del DIF-Acolman la carroza fúnebre con el féretro que contenía los restos de la presidenta honoraria.

Vecinos de las inmediaciones del DIF escucharon las sirenas de patrullas, ambulancias de Protección Civil, así como de Bomberos, quienes de esa manera saludaban y anunciaban la llegada del cortejo fúnebre, al inmueble ubicado sobre la Calzada de los Agustinos en la zona centro del municipio.

Fue la tarde del pasado 30 de diciembre cuando el gobierno municipal de Acolman, a través de las redes sociales oficiales, dio a conocer el fallecimiento de Elizabeth Contreras Ramos, esposa del presidente municipal, Rigoberto Cortés Melgoza y presidenta honorífica del DIF Acolman 2019-2021, quien se contagió del virus SARS-CoV-2 y durante dos semanas luchó contra la enfermedad.

En las instalaciones del DIF, el féretro ya era esperado por familiares, personal del ayuntamiento y amigos así como un mariachi, para dar el último adiós.

En el lugar, bajo las medidas sanitarias para evitar cualquier riesgo de contagio por Covid-19, el ataúd se encontraba sellado y completamente cubierto con polietileno transparente (emplayado) y en turnos las personas que se encontraban en el sitio, realizaron guardias de honor.

Al parecer, horas antes, se ofreció una misa de cuerpo presente, a la que sólo asistieron unas cuantas personas entre colaboradores y familiares. Luego del homenaje en las instalaciones del DIF-Acolman, el féretro fue trasladado para dar cristiana sepultura, el sitio no fue dado a conocer pero se cree será en el panteón municipal.