Ante la detección de aceite comestible adulterado, como resultado de un estudio de calidad efectuado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), la dependencia hizo un llamado a la ciudadanía en el valle de Toluca para denunciar cualquier irregularidad.

Cabe mencionar que el Laboratorio de la Profeco analizó 32 productos de aceite comestible y detectó ocho adulterados, y aunque éstos no representan riesgo para la salud, la realidad es que se engaña al consumidor.

Dicha investigación se realizó del 5 de febrero al 15 de abril de este año, y entre los aspectos analizados, se encuentran: la información comercial, el contenido neto, la autenticidad, tendencia al envejecimiento, a volverse rancio y al cambio de sabor, aplicando la normatividad nacional vigente.

Aceites adulterados

El hallazgo principal del estudio es que en ocho productos se encontró que los aceites no son puros, 4 de aguacate, 3 de ajonjolí y 1 de uva, y si bien no representan riesgos para la salud, el producto no es lo que oferta.

Mientras que los productos detectados como adulterados, son: San Lucas, aceite de pepita de uva, presentación de 500 ml; Cate de mi corazón, producto de aguacate mediterráneo, presentación de 250 ml y Avocare, aceite de aguacate 100% de origen natural, presentación de 250 ml.

Asimismo, la Profeco analizó otras marcas como: San Lucas, producto de aguacate extra virgen gourmet, presentación 500 ml; Kaporo, aceite de ajonjolí Blend, presentación de 190 ml; Foreway Sesame Expert, aceite de ajonjolí, presentación de 185 ml y Kum Chum, producto de ajonjolí prensado en frío, presentación de 248 ml.

Productos no cumplieron con sus declaratorias

En cuanto al contenido neto, el laboratorio de la Profeco detectó que dos marcas no cumplieron con sus declaratorias: Satoru, aceite de ajonjolí de 275 ml y la Cocina Verde, aceite de ajonjolí orgánico de 520 ml.

Por lo anterior, la dependencia federal informó que todos los productos con falta o incumplimiento fueron sujetos a procedimiento por infracción a la ley y están en proceso de la sanción que en su caso corresponda.

Finalmente la Profeco enfatizó que las condiciones de almacenamiento de estos productos son muy importantes, por lo que recomienda evitar colocarlos donde haya luz y calor porque se acelera la tendencia al envejecimiento.