Toluca, México.- El 2018 fue un año difícil para el Banco de Alimentos de la entidad mexiquense, pues los acopios realizados con empresas diversas se redujeron entre un cinco y un diez por ciento, informó el titular de la institución de Asistencia Privada, Alberto Canul Juárez, quien precisó que gracias a la reserva de alimentos que tenían lograron continuar otorgando los apoyos alimentarios a los más vulnerables.
Destacó que pese a ello, durante el primer semestre de este año hubo estabilidad en la adquisición de productos que nadie les dona, tales como el frijol, el arroz y el aceite.
Canul Juárez estimó que durante este año las solicitudes de apoyo incrementaron alrededor del cinco por ciento, es decir, mientras que en 2017 se alimentaron a 125 mil personas –alrededor de 25 mil familias en situación de carencia alimenticia-, este año se proyectó el apoyo a 138 mil personas –alrededor de 28 mil familias-.
En el caso de las aportaciones, el titular del Banco de Alimentos mexiquense sostuvo en cuanto a las aportaciones se registró una reducción importante, pues mientras que en años anteriores la institución sólo adquiría 80 toneladas de alimento con recursos propios de manera mensual, hoy día se compran entre 110 y 120 toneladas.
Sin embargo ahorita estamos en una situación financiera adecuada, esperamos que el año que entra podamos seguir manteniendo esas 28 mil familias, cuando menos al principio del año, y si la situación se compone, que podamos tener un poco más de producto que nos vayan donando y seguiríamos subiendo
En ese sentido, Alberto Canul dijo confiar en que los diputados de la Cámara Alta y la local legislen para sancionar a los empresarios y empresas que registren desperdicio de alimentos en la industria y el comercio.
