Amanalco, lugar donde nace el agua, posee paisajes, que por su belleza cautiva a quienes lo visitan. Su gente nos embelesa en las costumbres que desbordan la magia y la nobleza de sus ancestros. Se llega a este municipio del Estado de México, por la carretera no. 1. Toluca-Valle de Bravo; la Autopista del Bicentenario Toluca- Valle de Bravo; carretera libre Toluca-Villa Victoria- Valle de Bravo; Toluca Bejucos-Temascaltepec, y a 30 minutos del Centro de Valle de Bravo.
La festividad de Corpus Christi es una de las más antiguas y solemnes en la Iglesia Católica. Los misioneros que evangelizaron la expandieron a lo largo y ancho de la Nueva España. En el Arzobispado de México, encabezado en aquel tiempo por Zumárraga, cuidó porque su feligresía viviera este sacramento, instituido por Cristo en la Última Cena, como lo narran los evangelios del Nuevo Testamento.
Actualmente esta festividad se lleva a cabo en cada una de las diócesis de los arzobispados de la República Mexicana. En el territorio mexiquense, que antaño pertenecía al Arzobispado de México, se celebra con toda solemnidad.
Los santos patrones de las comunidades del municipio de Amanalco serán conducidos en andas por los respectivos mayordomos, fiscales y feligreses a la Parroquia de San Jerónimo, durante la mañana del domingo (19 de junio), acatando la liturgia de la Iglesia, para que después de la Celebración Eucarística, presidida por el párroco Alder Juncal Martínez, quien busca que permanezcan unidos en la fe. Después de terminada la misa dominical se lleva a cabo la Solemne Procesión por las calles de la Villa de Becerra, cabecera municipal de Amanalco.
Durante la procesión, llama la atención de los espectadores las telas y bordados con los que son adornados los altares en andas de los santos patrones, así los rosarios de flores, panales de miel, frutas y panes de fiesta. Todos los integrantes de cada pueblo van acompañados por grupos musicales, que cantan oraciones propias de la cultura otomí. Una de las atracciones de esta procesión, debían ser las yuntas de novillos, que por falta de motivación y traslado, hace unos años que no participan. Ahora la Agrupación de Jinetes, que simulando a los mayordomos de las haciendas, son los que resguardan con sus equinos engalanados con listones de colores.
Después de los compromisos religiosos, los delegados, mayordomos, fiscales e invitados, comparten el pan y la sal, y los visitantes, en el tianguis de la Villa, degustan la variedad de alimentos como son: la barbacoa de horno, carnitas, tamales, cecina, enchiladas rojas, trucha, aguas de fruta, galletas de maíz y nieves de zarza, así como el pulque, y para los curiosos el ancestral zende, bebida elaborada de planta de maíz tierno. También los licores de zarza y membrillo son muy solicitados.
La fiesta de Corpus Christi en el municipio de Amanalco es la más representativa, la que concluye hasta el martes siguiente, cuando los nativos de cada una de las comunidades realizan la última procesión, en la que se van despidiendo con sus santos patrones, en el marco del rito otomí en los cuatro puntos cardinales, hermanados y con la esperanza recibir las bondades de Dios y el fruto de sus sementeras.
