Para la familia Gutiérrez Medina el retorno a clases de forma virtual fue de improvisar la tecnología que se tiene a la mano, con los roles para atender las clases por televisión.
"Apenas ayer en la noche pudimos configurar la tele, y acomodamos la sala para las sesiones", explicó Mireya Medina.
El regreso a clases para la mayoría de familias fue así, con complicaciones, por no adaptarse aún al sistema virtual y los horarios de programación.
"La primera sesión fue a las siete y media de la mañana para preescolar, y a las nueve treinta para primero de primaria, pero no las pudimos tomar, porque yo salgo muy temprano a trabajar y mi esposa sale a comprar comida", comentó Roberto Gutiérrez.
La familia tiene hijos en preescolar, primaria y secundaria, por lo que vieron en la necesidad de adquirir tabletas y están pensando en comprar una segunda pantalla.
"Nuestra tele no es pantalla, es de las antiguas y es solo una, necesitamos otra para que se vayan rolando los niños", añadió Mireya.
La pareja aún está analizando sus roles, pues ambos trabajan, y no todos los días podrán estar para asesorar a sus hijos.
"La verdad es que es todo un relajo, porque además de las clases en la tele, hay que darles reforzamiento a los niños para ver si están aprendiendo, de nada sirve si no les entra nada", dijo Roberto Gutiérrez.
Este lunes su hija de primero de primaria no pudo acceder a la sesiones por la confusión de los canales, mientras que su hija de sexto de primaria tomó las clases de la tarde y el de secundaria solo tomó una sesión.
"En secundaria no hubo repasos de español, historia o matemáticas, les pusieron una clase de ballet", comentó Mireya.
Ella tuvo que dejar de asistir a su empleo este lunes para asesorar a sus hijos, pues comentó que no se han entregado los libros y no hay material con el que se puedan ayudar.
"Mi hijo el de secundaria se quedó dormido, porque la clase no tuvo Información de una materia en específico", añadió Roberto.