Derivado de que los jóvenes no cuentan con la preparación suficiente o ésta ya no responde a los requerimientos actuales de las empresas, se trata del grupo de la población con menores oportunidades laborales en el Estado de México y el país, con una tasa de desempleo del 5.3%.
Para Beatriz Robles Urquiza, directora de la marca especializada en empleo Manpower, dicho panorama obedece a que existen carreras universitarias que ya dejaron de ser viables, como Derecho, Humanidades o Historia, y por ende hasta un 67% de las unidades económicas no encuentran el talento laboral que requieren.
Por ende, lamentó que muchas oportunidades de trabajo para este sector de la población, se estén concentrando en el sector informal de la economía, ya que se trata de espacios en donde no se proporcionan prestaciones, ni otro tipo de beneficios que sí ofrecen las empresas formales, como los relativos a la salud y la vivienda.
“Hoy tenemos a 33.1 millones de mexicanos en la economía informal, por lo que se trata de un rubro en el que tendrán que trabajar los empresarios en coordinación con las autoridades”, señaló.
Para revertir, dijo, la informalidad y brindar mayores oportunidades para los jóvenes, se requiere de nuevas y mejores inversiones, así como incentivos fiscales para las empresas y el establecimiento de la seguridad jurídica.
“Todavía tenemos un camino muy importante que seguir en lo que corresponde a la implementación de mayores y mejores incentivos para la inversión, al igual que en la parte de la seguridad para garantizar la inversión”, sostuvo.
Derivado de lo anterior, Robles Urquiza recomendó a los jóvenes pensar en carreras de nivel superior, relacionadas con las Nuevas Tecnologías de la Información, el rubro de Energía y Ciencias de la Vida y la Salud.
“Sabemos que los empleadores ya no se están enfocando a la parte tradicional para contratar, motivo por el cual están volteando a ver a las mujeres, e incluso a las personas de mayor edad, porque las fuentes tradicionales de empleo ya no están funcionando”, apuntó.