Durante el 2020 el Órgano Superior de Fiscalización detectó que el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) publicó salarios más bajos de los que realmente percibían sus funcionarios, tuvo más recursos de los presupuestados y, pese a la crisis que vive, reportó un subejercicio.
El informe de resultados de la Cuenta Pública 2020 del instituto refiere que no cumplió con todas las metas establecidas, ni con publicar su información financiera, como exige la Ley General de Contabilidad Gubernamental.
También exhibió capacidad económica del ISSEMyM para asumir sus obligaciones y una tendencia a la alta en su solvencia, aunque ese organismo terminó el 2020 con un endeudamiento en observación.
En este informe no hubo auditoría al ISSEMyM, solo la revisión a la cuenta pública, por lo cual el OSFEM no dio a conocer las cuentas por cobrar del instituto, es decir, los adeudos de entes estatales y municipales por cuotas y aportaciones.
El informe
De acuerdo con el informe de la Cuenta Pública 2020 el Instituto tenía previsto ejercer más de 25 mil millones, pero tuvo ingresos por 32 mil 821 millones y gastó 30 mil 191 millones de pesos, por lo cual registró un superávit de dos mil 630 millones de pesos.
La revisión mostró que mientras en los años 2018 y 2019 tuvo un nivel de endeudamiento bajo y sostenible, para el 2020 éste fue considerado en observación por las obligaciones a corto plazo con proveedores y contratistas contra sus ingresos totales.
Aún así, contó con 3.1 pesos para pagar cada peso de deuda adquirida a corto plazo; por lo cual, hasta el 31 de diciembre del 2020 mostró capacidad económica para asumir sus obligaciones y una tendencia a la alta en la solvencia, respecto al ejercicio fiscal anterior del 2019.
El órgano superior identificó deficiencias e incongruencias en el cumplimiento de metas, respecto al recurso ejercido en programas como: salud para la población infantil y adolescente, prestaciones potestativas, prestaciones obligatorias, desarrollo de la función pública y ética en el servicio público y prevención médica para la comunidad.
El OSFEM señaló que el cumplimiento general de metas fue del 82%, pero en el programa salud para la población infantil y adolescente apenas llegó al 59.9%, pues fue menor a lo programado, por lo cual ese instituto no cumplió con lo establecido en el Código Financiero, ni en la Ley de Planeación del Estado de México y Municipios.
Otro señalamiento fue que en materia de servicios personales rebasó el porcentaje establecido, pues de acuerdo con la Ley de Disciplina Fiscal el incremento en ese rubro de un año a otro no debe ser mayor al 2%, pero entre 2019 y 2020 para el ISSEMyM aumentó en un 4.7%, por lo cual incumplió esa norma.
También rebasó el porcentaje establecido para el pago de Adeudos de Ejercicios Fiscales Anteriores (ADEFAS), que es el 2%, pues para el ISSEMYM, en el 2020, fue del 4.3%.
Adicionalmente, el ISSEMYM no publicó ninguno de los 26 puntos exigidos por la Ley General de Contabilidad Gubernamental sobre su información financiera, que debería estar disponible en su página de internet; por lo cual incumplió con esa norma que obliga a dar a conocer bienes muebles e inmuebles, los gastos, avances presupuestarios y contables, el presupuesto aprobado, modificado, comprometido, devengado y ejercido, el estado de situación financiera, deuda, entre otros.
Salarios
El órgano también verificó la nómina del instituto, donde identificó que el sueldo mensual bruto más alto fue de 236 mil 940 pesos, y el más bajo de apenas 400 1.6 pesos; sin embargo no informa a quién correspondió el salario más alto, pues la directora de ese instituto, de acuerdo con la nómina, percibía 122 mil 646 pesos de remuneración mensual bruta.
El órgano superior exhibió que el Instituto de Seguridad Social de la entidad incumplió con transparentar adecuadamente los salarios, pues entre junio y octubre del 2020 en la nómina presentó montos distintos y en la página de internet publicó salarios más bajos de los que realmente cobran los funcionarios.
Un ejemplo es la directora general, de quien publicó, en la plataforma de transparencia, que percibía 113 mil 646 pesos al mes, pero en la nómina de junio se registró un salario de 135 416 pesos, y en la de octubre, 122 mil 646 pesos. Ambas cifras fueron más altas de lo que se refiere en la plataforma Ipomex.
Lo mismo sucedió con otros tres funcionarios, donde, tras la verificación del OSFEM, detectó diferencias de 14 mil y 25 pesos en el primer semestre, y de nueve mil a 19 mil pesos en el segundo semestre, entre lo reportados en la nómina y lo publicado en el portal de transparencia.