El próximo mes de diciembre la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) entregará los 210 departamentos a las familias afectadas por el desgajamiento del Cerro Chiquihuite que se ubica en la zona oriente del municipio de Tlalnepantla y que sepultó con enormes rocas varias casas habitadas.
El alcalde de Tlalnepantla Marco Antonio Rodríguez informó que los departamentos se encuentran terminados para que las familias puedan mudarse a sus nuevas viviendas.
La edificación del complejo habitacional se encuentra a cargo de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) en conjunto con la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Cada vivienda fue construida en 65m2 y dispondrá de tres recámaras, dos sanitarios, sala-comedor, cocina, área de lavado, calentador de gas y sistemas de ahorro de agua, lo que significa un espacio digno y seguro para las más de mil personas que serán beneficiadas una vez que concluya la construcción.
Muchas de las familias rentaban casas en la zona que fue desalojada por el desprendimiento de rocas, por lo que podrían quedar fuera del programa de vivienda para los damnificados del Chiquihuite.
Los hechos
El 10 de septiembre de 2021, antes de las 15:00 horas, se escuchó un fuerte estruendo en la colonia Lázaro Cárdenas, considerada como una de las más pobladas de América Latina con más de 250 mil habitantes, se trataba de un desgajamiento de una parte de la ladera, desprendiéndose enormes rocas que cayeron sobre algunas casas.
Las piedras de hasta 250 toneladas aplastaron 4 viviendas, pero fueron afectadas otras diez en su infraestructura, mientras que en riesgo fueron dictaminadas primeramente 170 casas y la cifra aumentando hasta 220.
Cuatro personas fallecieron en el accidente, una joven estudiante de la UNAM, una madre de familia y sus dos hijos, cuyos cuerpos fueron rescatados días después, tras un trabajo intenso de las unidades de rescate de los tres niveles de gobierno.
No hay riesgo en la zona
El director de protección civil de Tlalnepantla, Fabricio Montiel aseguró que en la llamada zona cero ya no existe riesgo de derrumbes, “en 1.2 kilómetros de la ladera del cerro se levantó un muro de más de 100 metros, obra que estuvo a cargo de los gobiernos estatal y federal”.
Las autoridades de Tlalnepantla buscan demoler las viviendas que quedaran vacías, al entregarles sus nuevas casas a los damnificados, para evitar que vuelvan a ocuparlas.