Con la participación de más de 10 mil feligreses este Vienes Santo se llevó a cabo la 46 representación de la Pasión de Cristo en la delegación de San Mateo Oxtotitlán, acto emblemático del municipio de Toluca dentro de las actividades propias de la Semana Santa.
Un acto que reúnen a alrededor de 150 personas, entre soldados romanos, mujeres piadosas, jóvenes y niños, quienes participan del sufrimiento del hijos de Dios, ataviados con túnicas, cordones y mantos.
En el inicio de la escenificación, a las 12:00 horas, Jesús fue llevado por los soldados romanos, como un reo más para posteriormente ser presentado ante Pilato. Con ese acto arrancó la representación en una de las comunidades tradicionales del municipio en la Semana Mayor.
Semana Santa en Ecatepec; miles recorren las calles
Pese a que las altas temperaturas registradas en la capital mexiquense, miles de personas participaron con Jesús de diversos actos doloroso como la colocación de la corona de espinas y los azotes que ordenó Pilato.
Por más de una hora, Jesús tránsito por los tres escenarios habilitados a un costado de la Parroquia de San Mateo Apóstol, entre insultos de soldados y la mirada atonita y el pesar de la concurrencia.
Ahí estaba el hijos de Dios, humilde, sencillo, silencioso, sin pronunciar palabras para defenderse de sus perseguidores siempre aceptando la voluntad de su Padre.
A las 14:20 horas, Jesús fue condenado a la Cruz, y los contingentes de fieles avanzaron con rumbo al cerro de la Teresona.
Cuesta arriba, y con paso apresurado por alrededor de dos kilómetros, Jesús avanzó cargando noventa kilogramos del madero, cuyo largo fue de seis metros.
Descalzo y por un estrecho camino, cayó hasta por tres veces, en medio de los soldados romanos que lo apresuraban y también lo insultaban.
Presuras iban tras él las mujeres piadosas como la Verónica, quien, con un paño, le limpió el sudor o cuando el cirineo se ofreció a ayudarlo a cargar el pesado madero. Ni la piedras, ni las veredas calientes detuvieron a Jesús en su caminar.
Alrededor de las 15:00 horas, Jesús llegó hasta la parte alta de El Cerro de la Teresona y, de inmediato, los soldados romanos levantaron las cruces de los dos ladrones que lo acompañaron y también la de Jesús.
A pesar de que los rayos del Sol estaba en su punto más alto, miles de personas lo acompañaron en su caminar. Mujeres, hombres, niños y niñas, así como algunos adultos mayores padecieron con las decenas de latigazos de manos de los soldados romanos.
Transitó por caminos pedregosos, con piedras, en compañía de las mujeres y hombres, niños y niñas y los dos ladrones.
A las 15:27 horas, Jesús es levantado en la Cruz. Agotado, sin fuerzas y casi sin aliento, pronunció:
"Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen", enseguida encargó a su madre a sus discípulo, pidió agua y le ofrecieron un lienzo con vinagre.
"Todo está cumplido, Padre mío, en tus manos encomiendo mi espíritu", fueron sus últimas palabras.
El silencio invadió por unos momentos el cerro de La Teresona y la tristeza conmovió a los asistentes.
Este sábado continuarán los ritos de la Semana Santa y el domingo concluirán con la misa de resurrección.