En Valle de Bravo 4 mil familias dan atención al turismo

El pago a meseros, cocineros o choferes no es bien remunerado como algunos piensan

Arturo Aguilar | El Sol de Toluca

  · domingo 27 de diciembre de 2020

Arturo Aguilar | El Sol de Toluca

En este municipio, con la categoría de Pueblo Mágico y una localidad referente del Estado de México, son alrededor de cuatro mil familias las que dan atención al turismo nacional e internacional. Sin embargo, las ganancias son para dueño de establecimientos, el común de los habitantes son empleados que apenas ganan para sobrevivir.

Valle de Bravo es conocido por sus atractivos naturales, pero también por los que han sido acondicionados: paseo en lancha, raizar, en cuatrimoto, yate y hasta parapente

Tan sólo en 2019, 24 mil millones de pesos fueron generados por esta actividad económica en la entidad, por los 19.4 millones de turistas que la visitaron, dando empleo a 500 mil personas, de acuerdo con cifras del área de turismo estatal.

De ahí que los servicios turísticos de este Pueblo Mágico signifiquen el trabajo directo de más de 4 mil familias vallesanas, según el censo realizado este 2020 por las autoridades municipales.

Pero, ¿cómo se refleja esta derrama económica en los vallesanos que se emplean en los servicios turísticos?

A pesar de que el turismo a nivel estatal genera una derrama económica elevada, en el caso de las personas que se emplean con los dueños de los servicios turísticos gastronómicos, de hospedaje, de recreación o de actividades del turismo rural y cultural, no siempre es así.

Meseros y choferes

Por ejemplo un mesero en Valle de Bravo recibe mil 250 pesos a la semana en promedio, donde emplea casi cien horas en seis días de trabajo.

Desde hace 10 años Joaquín, un joven mesero del Pueblo Mágico, a diario lleva y recoge los alimentos y las bebidas desde la cocina hasta la mesa del comensal.

Joaquín refirió a El Sol de Toluca que antes de la pandemia de Covid-19 trabajaba de 8:00 a 16:00 horas de lunes a viernes. Tenía una hora para comer dentro de la empresa.

Los fines de semana su horario de trabajo se ampliaba de 8:00 a 23:00 horas, dependiendo de la afluencia de comensales.

Su sueldo no sobrepasaba los mil 250 pesos semanales, y podía incrementar hasta mil 500 si laboraba horas extra.

Sus ingresos los divide en el pago de renta. Con este sueldo apenas puede cubrir la cantidad de ingresos y egresos. La ventaja es que tiene segura la comida diaria.

“Sí me alcanza para vivir, ya como para ahorrar o para algo así, sí es más pesado, pero puedes llevar una vida normal, la ventaja mía es que no tengo vicios, porque no me alcanzaría para los vicios”, platicó Joaquín.

Toda la estructura que compone el ala delta puede alcanzar un costo de 5 mil dólares. Foto: archivo/Luis Camacho | El Sol de Toluca

Situación similar enfrentó un exchofer de una prestadora de servicios de guía turística en el Pueblo Mágico. Su nombre es Diego. Hace ya más de un año dejó este empleo.

Diego percibía 350 pesos al día durante sábado y domingo, pues descansaba toda la semana sin goce de sueldo.

Ni siquiera tenía acceso a los derechos que otorga la Ley Laboral, como seguridad social o primas vacacionales. Los 700 pesos que ganaba a la semana no le alcanzaban para sobrevivir.

A Diego le pagaban 70 pesos la hora extra de trabajo, pero sólo se le daba la oportunidad de disfrutar de este pago adicional por dos horas más.

En el caso de Joaquín, los dueños del restaurante donde labora sí le dan todos los beneficios que por ley debe tener un trabajador. Esta situación representa un alivio para el bolsillo de su familia

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Ingreso adicional

Joaquín y Diego laboran en las inmediaciones del embarcadero municipal. Han tenido la oportunidad de ganarse otro peso por recomendar a los prestadores de servicios turísticos, quienes ofrecen paseos en lancha, raizar, en cuatrimoto, yate o parapente.

Ambos empleados pueden ser gratificados con una comisión simbólica por recomendar este tipo de servicios.

El pago para los meseros, cocineros, bartender, choferes de todo tipo, camareras, limpieza en general, guías de recorridos turísticos en cualquier de sus modalidades, lancheros, pilotos, entre otros oficios de la actividad turísticas del Pueblo Mágico, no es bien remunerado como algunos piensan, y mucho menos para generar riqueza.

Es así como la derrama económica del turismo se refleja en los habitantes del municipio que si bien no ganan lo justo por su dedicación y esfuerzo, tampoco tienen un amplio abanico de posibilidades laborares al interior de la demarcación.

Toda la estructura que compone el ala delta puede alcanzar un costo de 5 mil dólares. Foto: archivo/Luis Camacho | El Sol de Toluca

Turismo responsable ante el Covid-19

En tiempos del Covid-19 las actividades turísticas de Valle de Bravo se han modificado para seguir generando un flujo en la economía familiar.

En el caso de los meseros, además de aplicar los protocolos de higiene, ahora también tienen que trabajar con careta, guantes y cubrebocas, y sanitizando constantemente su área de trabajo.

Incluso han tenido que migrar al uso de las nuevas tecnologías, pues los códigos QR para poder leer el menú son parte de la nueva normalidad a la que tienen que adaptarse.

“Sí ha bajado mucho el turismo, y ahorita con todas las medidas como que la gente tiene miedo, y también, como que muchos no están preparados para ese cambio, por ejemplos los clientes que no están preparados para usar las nuevas tecnologías que estamos usando ahorita, como los códigos”, dijo Joaquín.

Joaquín considera que su labor como mesero en la nueva normalidad ha sido complicado. Tiene que lidiar con nuevos factores que se suman a los que antes del Covid-19 ya representaban un reto.

“Sí ha afectado mucho porque ahorita hay propinas, pero como es muy poquita gente pues sí ha bajado mucho el turismo, nos ha afectado”, dijo con preocupación.

También se han alterado todas las prácticas recreativas que el turismo lleva a cabo en el Pueblo Mágico.


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