Toluca, México.- La falta de distribución de gasolina en algunas zonas de la entidad y del país atenta contra la seguridad, la cual es una de las necesidades básica de los seres humanos al dificultar la adquisición del producto, esto podría generar diversos impactos emocionales desde la tristeza hasta el estrés o la desesperación, señaló el coordinador del Centro de Estudios y Servicios Psicológicos Integrales (CESPI) de la UAEM, Alejandro Gutiérrez Cedeño.
En ese sentido, el especialista declaró que la dificultad para comprar dicho combustible incide en la actividad socio-económica de las personas directamente en el trabajo, la escuela, negocios, el movimiento de los bienes y servicios a través del transporte.
Cuando uno pierde esa posibilidad y seguridad, uno atenta contra una de las necesidades básicas del ser humano que es la seguridad, resultado de ello o de la ausencia, viene un caos personal
Los efectos a nivel personal, detalló, se manifestarán desde “una simple tristeza, agresión y violencia derivado de la colectividad, pareciera que la psicosis colectiva del fatalismo de lo que no se tiene en este momento”.
Ante la conformación de un escenario así y luego de altercados menores entres ciudadanos sucedidos a lo largo de la semana en algunas estaciones de gasolina, el profesor hizo un llamado a la prudencia, a la tranquilidad y a la paz, al recalcar las autoridades han informado es una estrategia de las autoridades en la distribución del hidrocarburo más no de desabasto al relacionarlo contra hechos delictivos.
No obstante, advirtió que de continuar ese padrón, la situación podría descontrolarse o “la gente podría entrar en conducta de agresión o de violencia, frustración sobre todo al no tener esta circunstancia, sabemos que la frustración nos puede llevar a conductas violentas o agresivas”.
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Finalmente y como resultado de todo esto, recomendó a la población ser prudente en la espera de la normalización del abasto y del anuncio de las autoridades, sin tomarse el tema como algo personal, “Debemos responder que seguramente las cosas van a mejorarán, no tengo porque pensar fatalistamente, sino que mejorarán ese es el pensamiento y no proyectarse en el fatalismo”.