Valle de México.- Organizaciones no gubernamentales dedicadas al cuidado del medio ambiente, integradas a la Red para la Conservación de la Sierra de Guadalupe, exigieron a los integrantes del Congreso local, legislar para rescatar las barrancas del Parque Estatal Sierra de Guadalupe.
A través de un escrito dirigido a la diputada y presidenta de la LX Legislatura Local, Azucena Cisneros Coss, se solicitó que se elabore una iniciativa de ley que permita legislar y reglamentar el rescate de las barrancas en la parte urbana que se derivan del parque estatal Sierra de Guadalupe, así como crear un organismo o los mecanismos en los que las asociaciones civiles tengan voz, voto, y forma de conocer la aplicación de los recursos que de dicha ley emanen, explicó, el presidente de las organizaciones Franature A. C. y de la Red para la Conservación de la Sierra de Guadalupe, Víctor Zendejas Orozco.
“Durante décadas las barrancas han sido tierra de nadie, urbanizadas con vialidades, abovedadas, convertidas en vertederos de aguas residuales a cielo abierto en detrimento de la salud de los habitantes del Valle de México y en basureros con un abandono ecológico tremendo, pero cuando se trata de su saneamiento y su rescate y preservación para beneficio de la comunidad no hay autoridad que se responsabilice de su mantenimiento”, destacó el líder ambientalista.
Zendejas Orozco, refirió que, “Franature AC.”, entregó diversas cartas de petición sobre el saneamiento y rescate de las mismas desde la gestión del licenciado Enrique Peña Nieto como gobernador del estado de México y, posteriormente, como presidente de la República. Asi como tambien con el exgobernador Eruviel Ávila Villegas y Alfredo del Mazo sin embargo no han recibido una respuesta positiva a su petición.
“Pese a que las A. C. tenemos voz, no contamos con una figura que nos permita tener decisiones sobre el manejo de los recursos públicos que pudiera manejar dicho Comité de Cuenca. Como ejemplo, en las gestiones para que alguna autoridad haga una declaratoria sobre el rescate de las barrancas en beneficio de la ciudadanía, se nos ha pedido una aportación de 300 mil pesos por parte del Comité a tres asociaciones para los Estudios Técnicos Justificativos de tres barrancas, recursos que no tenemos”, señaló.
Finalmente, el ambientalista comentó que, actualmente trabajan con escasos recursos que, en su gran mayoría, provienen de la buena voluntad de verdaderos ecologistas y la cooperación económica que en la medida de las posibilidades de cada quien aporta para la compra de herramientas.
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“Hay barrancas en las que, pese a nuestra voluntad, no podemos trabajar en ellas por el vertido de aguas residuales que pueden dañar nuestra salud. Un ejemplo es la Barranca Los Acuales, en Coacalco, donde pese a gestiones con las distintas administraciones que gobernaron en el pasado, no se logró que dichas aguas se reencausen al drenaje público, para beneficio de una densa población de su alrededor”, concluyó.
